El plenario de la Comisión Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo acordó el pasado 20 de diciembre rebajar los valores límites biológicos (VLB) del mercurio de 15 microgramos por litro de sangre a 10. Asimismo, acordó rebajar de 35 microgramos por litro de orina a 20. En función de esto -en vigor desde el pasado 1 de enero-, y según datos facilitados a los sindicatos por Asturiana de Zinc, la cuarta parte de la analíticas realizadas a trabajadores de la empresa que preside Santiago Zaldumbide revelan excesos de mercurio en el organismo.

Según Javier Vázquez, el secretario de Salud Laboral de la federación de Industria de Comisiones Obreras de Asturias, «a finales de febrero la empresa había realizado 346 analíticas; de ellas, 86 tienen los valores límite por encima de lo indicado por la Comisión. ¿Qué tiene que decir ahora el consejero de Sanidad ante esto? ¿Va a seguir quitándole importancia al caso?», se preguntó el sindicalista. Faustino Blanco, el responsable regional de la política sanitaria, declaró el jueves en Oviedo que la crisis del mercurio sólo afectaba a medio centenar de personas.

Los nuevos datos, según el análisis efectuado por Comisiones Obreras a partir de los datos ofrecidos por la compañía al comité de empresa, son los siguientes: en Tostación se realizaron 85 analíticas y de ellas 26 estuvieron por encima de los límites recomendados; en Fusión se realizaron 52 analíticas, 11 por encima; en Lixiviación se realizaron 71 analíticas, 12 por encima; en el Taller Eléctrico se realizaron 53 analíticas, 14 por encima; en el Taller Mecánico se realizaron 66 analíticas, 18 por encima; en el Laboratorio Central se realizaron 17 analíticas, 4 por encima. Y a estas se añade la analítica que resultó positiva y que se realizó en el Botiquín.

«Azsa tendrá que decir algo al respecto de esto. Y también el consejero de Sanidad. ¿O están esperando que pase algo peor?», se preguntó Javier Vázquez. «Ojalá que esta crisis quede en una anécdota, pero no será por el celo que ponen la empresa y el Principado. Y no digamos la Inspección de Trabajo. ¿Tenemos que meter denuncias todos los días para que se pongan a funcionar? ¿Qué es lo que necesitan para reaccionar? Es inconcebible», subrayó el sindicalista. «¿Qué hace la mutua de Azsa con estos datos? ¿Y el Sitaz? Tiene los mismos que nosotros, pero ahí siguen, con la boca cerrada. Y luego lo único que sueltan es que estamos sembrando la alarma», se indignó el responsable de Salud Laboral. «Nadie informa a los trabajadores de la fábrica ni tampoco a los de Imsa que han bajado los límites; se limitan a ampliar hasta el día 25 las analíticas», critican en CC OO.