La ladera de Pinos Altos sufrió el primer argayo del otoño. La tierra cayó sobre la avenida de Juan Sitges en Salinas aunque no llegó al paseo marítimo y no hubo que cortar la carretera. Los operarios municipales retiraron ayer el barro que comenzó a caer el lunes por la tarde. "Se llenó un camión con la tierra que argayó", señaló el concejal de Obras de Castrillón, José Luis Garrido. "Los técnicos municipales van a hacer un informe pero creo que va a seguir cayendo la tierra", indicó el edil.
Garrido manifestó que lo primero es saber de quién son los terrenos en los que se localizó el argayo para tomar medidas preventivas. "Lo más barato y más rápido sería ampliar y levantar el muro de hormigón e instalar redes tensoras. La solución definitiva pasaría por escalonar la ladera pero esa es más cara y más lenta", dijo.
El desprendimiento de tierra se produjo a pocos metros del argayo pendiente de reparar desde el pasado mayo y que ha enfrentado al Ayuntamiento y a Asturiana de Zinc (Azsa) porque las dos partes niegan ser propietarias de los terrenos. La carretera de Salinas a Arnao estuvo cerrada al tráfico desde el 19 de mayo hasta el 28 de junio por un argayo. La carretera está abierta aunque está acotada la zona de la calzada próxima al desprendimiento. En varios metros de la avenida de Juan Sitges solo se permite la circulación por un carril. El pasado invierno, varios desprendimientos de tierra afectaron a la carretera de Salinas a Arnao.
La reparación del argayo de Pinos Altos costará algo más de 40.000 euros, según la valoración realizada por los técnicos municipales. Las obras aún no tienen fecha de comienzo ni quién las ejecutará. La alcaldesa, Ángela Vallina, aseguró que los terrenos afectados por el argayo de mayo son de Azsa y que si la empresa incumple los plazos para reparar el talud el Ayuntamiento ejecutará las obras mediante procedimiento subsidiario, es decir que pasará la factura al propietario del suelo.
Azsa ejecutó el pasado mes de septiembre los trabajos de estabilización del talud de Pinos Altos en las inmediaciones del camino del Piemonte y en las inmediaciones de la playa del Dólar, junto a la boca del túnel de Arnao. Las obras tuvieron un coste de algo más de 12.000 euros. Los vecinos de Salinas temen que la situación se agrave en el talud de Pinos Altos cuando lleguen las lluvias. "Todos los otoños e inviernos se producen varios argayos en todo el frente de la ladera hacia la playa y el paseo marítimo y cerca del Museo de Anclas. Hay que tomar una decisión y solucionar el problema porque pueden pasar accidentes muy graves", indicaron los afectados.
