El alcalde, Jorge Suárez, compaginará su cargo municipal con el de presidente de la Mancomunidad del Cabo Peñas, que Gozón comparte con Carreño desde hace décadas. La intención del gobierno local es reforzar los servicios del ente supramunicipal y aprovechar los recursos que, a su juicio, antes "estaban sin desarrollar". Por lo pronto, el Ayuntamiento ya ha aportado 75.000 euros para intentar reducir la deuda que Gozón mantiene con este organismo, que ronda los 200.000 euros.
Suárez estará apoyado en su gestión mancomunada por César Fidalgo, edil de IU de Gozón, que fue reelegido también ayer como vocal delegado de Cabo Peñas, es decir, el mediador entre ambos ayuntamientos para sacar a flote los proyectos conjuntos de Carreño y Gozón.
Ambos cargos tendrán una duración de dos años. A mitad de mandato, Suárez cederá la presidencia a su homóloga del concejo de Carreño, Amelia Fernández. En el caso de la figura del vocal delegado tendrá que votarse entre los treinta y cuatro miembros que conforman este organismo.
En lo que respecta al concejo de Gozón, el gobierno local confía en poder desarrollar en los próximos meses un plan especial de renovación urbana en Luanco y el inventario de caminos, entre otros proyectos.