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La paradoja del Alto La Madera

El PSOE, que en Gijón ataca a los podemistas por permitir un gobierno de Foro, se apoya en los casquistas en Siero aun a costa de alejarse de Somos e IU

Pancarta colocada en la Autovía Minera, en el puente del Alto La Madera, antes de las elecciones. FRANCO TORRE

Una expresiva pancarta, estratégicamente colocada en el puente del Alto La Madera, aleccionaba a los usuarios de la Autovía Minera (AS-I) que abandonaban el concejo de Siero en dirección a la costa. "Bienvenidos a Gijón. Aquí gobierna la derecha gracias a Podemos", rezaba la pancarta, probablemente colocada por cuadros o simpatizantes socialistas. Una denuncia que contrasta con la situación que se vive, precisamente, en el cuarto concejo asturiano, donde es el PSOE el que pacta con Foro, mientras los ediles de Somos critican lo que, entienden, es una deriva hacia la derecha de los socialistas.

La paradójica situación política que viven ambos concejos llama la atención, sobre todo si se tiene en cuenta que, apenas unos días después de las elecciones, socialistas y foristas anunciaron un acuerdo para aprobar los presupuestos municipales de Siero para 2016. Una entente que, a juicio de los partidos de la oposición, ya estaba consolidada antes de los comicios, pero que PSOE y Foro habrían evitado anunciar antes de que los ciudadanos acudiesen a las urnas.

Cuestiones de calendario aparte, el Pleno de presupuestos volvió a reflejar la total falta de sintonía entre socialistas y representantes de Somos en el concejo. A la hora de valorar las cuentas, y haciendo alusión a la congelación de las partidas de Solidaridad, el portavoz de Somos, Javier Pintado, afirmó que los socialistas "carecen de alma y corazón", para concluir que "es fácil entender por qué Foro y el PSOE han llegado a acuerdos", ya que "cualquier partido de la derecha aprobaría estos presupuestos".

En su intervención, Ángel García entró en el cuerpo a cuerpo y vertió diversas alusiones a Somos, afirmando que hay "partidos nuevos que están utilizando argumentos arcaicos", antes de afirmar que "Foro es el único partido del Pleno con el que se puede llegar a acuerdos", anunciando al tiempo que, a futuro, será también su primera opción de pacto. Así las cosas, la compleja aritmética de la corporación sierense explica en gran medida la querencia de los socialistas por pactar con Foro. Pese a que el reparto de asientos en el Pleno facilitaría una mayoría estable de izquierdas a la manera del tripartito sierense (PSOE tiene siete ediles, Somos cuatro e IU tres, en un Pleno en el que el 13 es el número mágico que marca la mayoría absoluta), la nula sintonía entre PSOE y Somos imposibilita este frente y plantea serias dificultades para que los socialistas puedan cuadrar mayorías alternativas.

En cambio, el apoyo de Foro propicia que el PSOE sólo precise del voto a favor de una de las tres fuerzas con un único concejal -Ciudadanos, la Plataforma Vecinal de La Fresneda o el Partido Independiente de Siero- para aprobar cualquier cuestión.

La entente con Foro, en todo caso, también pasa factura al PSOE. Pese a su practicidad, la militancia y los votantes socialistas están confusos ante la sintonía con un partido que les arrebató la Alcaldía de manera "poco deportiva" (como dejaron claro los tribunales) y al que, incluso, achacaron malas artes durante la campaña electoral.

Entretanto, en los mentideros de Siero, muy activos durante el último lustro, empieza a especularse con un inminente pacto de gobierno entre casquistas y socialistas, en el que los foristas ganarían un par de liberaciones y algunas competencias que están dando auténticos dolores de cabeza a los ediles del PSOE, mientras que el equipo de Ángel García lograría la ansiada estabilidad.

El secretario general de los socialistas, Roberto García Morís, ha restado credibilidad a estas especulaciones, y desde el partido incluso se apunta a Somos como origen de las habladurías. Pero nadie olvida que en Siero, con más frecuencia de lo habitual, el rumor es la antesala de la crisis política.

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