La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Diversión familiar entre cartón

"Es una actividad ideal para pasar tiempo con los niños", dicen los padres en el taller de manualidades del Museo Antón

Seis familias de Carreño disfrutaron ayer, entre cajas, papeles de colores, pegamento y tijeras, de una jornada de manualidades y creatividad en el Museo Antón. Bajo el título "¡Esto no es una caja!", padres, madres e hijos transformaron cubos de cartón en lo que serían "las casas de sus sueños", leitmotiv de la sesión de ayer, y que se repetirán durante otros siete fines de semana. Durante la sesión, mayores y pequeños coincidían en que se trata de "una buena y divertida iniciativa" para "pasar más tiempo en familia".

"Es una casa con un balcón grande y una ventana grande con forma de corazón y colores. Me gusta así, porque es chachi", explicó la pequeña Carmen Acuña, quien demostró tener las ideas muy claras en lo que a arquitectura se refiere. A su lado, acompañándole en las tareas de construcción se encontraba su madre Cristina Acuña, quien destacó de esta iniciativa que "permite conocer otras facetas de los niños que, en otras situaciones, no son tan accesibles". "Carmen es habitual a los talleres del museo porque, la verdad, están genial. Pero esta propuesta, en familia, me parece estupenda. Hay veces que los niños hacen muchas actividades pero rara vez con sus padres, y a veces da la sensación de que estás perdiendo de vivir experiencias con ellos. Y eso es algo a valorar", aseguró la madre.

Jesús García, quien preparaba con su hija Aitana una casa de muñecas de cartón, también destacó que el taller de manualidades para familias "permite disfrutar de los días de descanso con los niños, que enseguida crecen y esto se acaba". "Es muy divertido y nos lo pasamos muy bien", aseguró la pequeña de los García, quien confiesa que se apunta "a todo" y que ayer preparó un alojamiento para sus muñecas. "Tengo muchas y así puedo jugar allí con ellas", destacó.

"Es una actividad muy bonita y divertida, que además te permite hacer cosas que quizás no harías en casa. A veces cuesta pararse a hacer cosas con lo niños porque te pones a limpiar, hacer la colada... Y, al menos, al salir del hogar, estando en un sitio como el museo, no tienes distracciones y te centras en las manualidades", explicó Sandra Blanco, quien acompañó a su hija, Emma Varela, que eligió diseñar "una casa con prao, porque molan más que los pisos".

Compartir el artículo

stats