"Llevo el casco para no hacerme pupa", expresa el pequeño Alejo Cardín, de tres años. "Si lo pones no te mancas cuando caes", apostilla su compañero de clase Martín Gallego. Ambos son alumnos de la escuela rural de Guimarán-El Valle que ayer recibieron una clase de educación vial acompañados de los pequeños que acuden al centro de Logrezana. En total, veintiún niños montados en bicicleta y con la lección bien aprendida. Son conscientes de que el uso del casco es necesario a la hora de salir a dar una vuelta en bici. Y así se lo dejaron claro a Andrés Medina, coordinador de Educación vial de la Dirección General de Tráfico.
"Aquí estamos con niños de entre tres y siete años y la educación vial en estas edades se centra sobre todo en que tengan habilidad con las bicicletas, aprendan lo que es un paso de peatones, los semáforos y de esta manera comiencen a conducir su primer vehículo, la bicicleta ya que no es un juguete", expresó Medina, mientras explicaba a los pequeños el desarrollo del circuito improvisado y organizado en la pista del centro de iniciativa rural del Monte Areo.
La pequeña Hebe Campesino maneja la bicicleta con cuidado de no pisar los conos. Es una ciclista que entrena en Piedeloro, donde dice, que los coches "siempre respetan a los ciclistas" y dejan el pertinente espacio para circular. Sobre si ese respeto se aplica en otras zonas, duda. Nala González es de las más pequeñas del centro y a veces le cuesta incluso hasta dar pedal. "Vamos Nala", le anima un compañero. César Valdés y Paula Pérez hacen cola y esperan su turno para hacer zig zag y no pisar con sus ruedas ninguno de los obstáculos. Algunos llevan ruedines, pero la mayoría no. "Poco a poco tenemos que introducir a los niños en la educación vial y pensar en el futuro", señala Raquel Casado, jefa provincial de Tráfico en Asturias, que habló también de la importancia de que exista un "respeto mutuo" entre los ciclistas y los coches. "Los peatones y los ciclistas son el colectivo más vulnerable en la carretera, con educación intentaremos evitar graves accidentes", añadió Casado, al tiempo que el pequeño Jesús Castillo y Álvaro Menéndez, entre otros alumnos continúan dando vueltas. "Ahora que están cansados, seguiremos hablando de educación vial en el aula", concluyó Andrés Medina.
