La hostelería en Candás está en pie de guerra. Se acerca el verano y el Ayuntamiento amenaza con denuncias a varios establecimientos con terraza en su exterior. El consistorio señala que deben respetar "los horarios de instalación (...), así como retirar todos los elementos cuando se extinga el plazo de la autorización".
La mayoría de los hosteleros prefiere mantener el anonimato a la hora de hablar del asunto. En el centro, señalan que "el artículo 31 que indica la carta no habla de retirar las terrazas cada día en ningún apartado", algo que podrían hacer algunos establecimientos, pero no todos, pues "los locales no dan para ello. Y no puedes echar a la gente dentro para meter las mesas".
Felisa Espinosa, de Casa Repinaldo, coincide en que "a unos les entra en el bar y a otros, no", pero señala que "no molestamos al reparto y los que lo hacen, las retiran de la calle". La propietaria de este establecimiento en la céntrica plaza de La Baragaña achaca los problemas a "algún caso de vandalismo con alguna terraza".
En el puerto están gran parte de los afectados, sorprendidos porque "dependemos de Puertos del Estado, aunque también el Ayuntamiento tenga algo que decir". En su caso, "tenemos las mamparas atornilladas al suelo porque nos lo pide Puertos, aquí sopla el nordeste y las tiraría continuamente", explican. Creen que el problema se da "con algún caso concreto" y esperan "que se resuelva sin afectar al resto".
Cuestión aparte es la calle Valdés Pumarino, donde los hosteleros ponen terrazas en fin de semana y verano en un horario concreto. Por allí pasa el tráfico y saben que la terraza debe ser retirada a horas concretas. El resto está con el alma en vilo.
