Gijón, J. E. CIMA

Javi Clemente ya tiene perfilado el Sporting que se enfrentará esta tarde a un Rayo Vallecano que «lleva una campaña muy buena desde que se reforzó en diciembre y tiene gente de mucho nivel. También Michu, que además vendrá motivado porque es del Oviedo y no quiso venir en su día al Sporting. Luego está Movilla, que parece que tiene 25 años y es el director del juego. Piensan que aún les faltan algunos puntos para salvarse. Será un partido difícil, pero se puede ganar».

El entrenador del Sporting prefiere fijarse más en cómo actúe su equipo y en las altas que tiene. «Gregory se recuperó muy rápido por su insistencia y dedicación. Le falta aún un pelín de ritmo debido a la operación en la rodilla, pero lo suple con su valentía y entrega. Trejo es del más alto nivel del equipo, tiene muchísima calidad y aunque a veces es un poco frío, trabaja y corre mucho. En el Bernabeu dos pequeños errores suyos nos costaron dos goles, pero con esos fallos se irá a la tumba. Y en cuanto a la ausencia de Barral tengo tres delanteros y decidí elegir a Sangoy y a Bilic por su trabajo diario y dinamismo».

Lora estuvo toda la temporada jugando de lateral derecho y con la llegada de Clemente lo hace en el centro del campo. El técnico elogia también al de Móstoles porque es «dinámico, tiene mucha recuperación de balones, se mata en el campo, es honesto y es estable con mucho rendimiento e incluso estando mal, también tiene nivel alto. Es el mejor que tenemos. La pena es que cuando vine estaba lesionado y se perdió tres partidos. Lora aporta mucho a este equipo y es fantástico».

Cuando se le pregunta por cómo recibirá la afición al equipo y recordando el inicio hostil ante el Levante, Clemente matiza: «A mí no me gusta que silben a los jugadores, porque rinden menos, pero el público tiene esa libertad. Trejo comentaba que nunca había vivido marcar un gol y que le pitaran. ¿Qué quieren que haga? Personalmente, si alguien juega mal yo no le silbaría; al que juega mal y se deja el alma en el campo le animaría a seguir así porque rendirá más. Todo el mundo vio cómo el equipo, en Madrid, corrió hasta reventar y eso se lo tiene que reconocer el público».

Precisamente de ese partido en el Bernabeu recuerda el de Baracaldo: «Planteamos un partido para ganar pero si ese pedazo de equipo rival acierta y árbitro te destroza, acabas perdiendo. El colegiado tenía que expulsar a Pepe por agresividad al tirar un balonazo al banquillo, también a Sergio Ramos en el penalty, al igual que debió echar antes a Canella. Y jugando con uno más y con 0-1 de ventaja la victoria hubiera sido nuestra. Se habla mucho de arbitrajes, pero se nota que estamos en cola viendo a los colegiados que nos meten. Sólo tuvimos dos buenos».

En ese repaso a los partidos que lleva dirigiendo al Sporting, Clemente ratifica: «Ante grandes como el Barcelona y Madrid estuvimos estupendos, frente al Getafe canallas y ante el Mallorca francamente bien. Pero a veces regalamos partidos con cosas ridículas y eso es inentrenable. Se falla, pero la actitud del equipo es excepcional. Está claro que el que no lucha no juega».

Una de las facetas que más evolucionaron desde su llegada, según Clemente, es que «ahora se aguanta bastante bien los noventa minutos cuando antes en los últimos veinte nos costaba. Tener buen tono físico y saber dosificarlo es importante en este final y también recordar cómo se hace el pressing».

Que se descienda matemáticamente puede estar a la vuelta de la esquina, pero mientras tanto el vasco dice: «Hay que luchar hasta la última esperanza. Ojalá no ocurra; pero si sucede yo no voy arrojar la toalla porque habrá que seguir luchando para representar bien al club y también porque otros equipos están implicados. Hay que ser honestos».