El ciclista asturiano Samuel Sánchez (Oviedo, 5 de febrero de 1978) está como chico con zapatos nuevos, encantado de haber fichado por el equipo estadounidense BMC donde corren campeones del mundo como Evans, Gilbert y Hushovd. El campeón olímpico en China reconoce que "pasaron ya Papa Noel y los Reyes Magos, pero ahora voy a tener el mejor regalo de cumpleaños (cumple mañana 36) al fichar por uno de los dos más grandes equipos en el panorama mundial".
-¿Tantos días entrenándose y sin tener equipo fue muy duro?
-No llegué a llorar pero lo pasé mal porque en casa me preguntaba cómo siendo un corredor que gana buenas carreras no tenía sitio en un equipo. También es cierto que la mayor dificultad fue que me desvinculé del Euskaltel el 15 de diciembre -llevaba con ellos de profesional desde el 2000- en un pacto bueno para las dos partes y ya tenían los grandes equipos la plantillas cerradas. No quería retirarme así saliendo por la puerta de atrás porque tengo ciclismo aún en mis piernas.
-¿Está preparado para empezar ya a competir?
-Sí. Me venía preparando cada día con mucha ilusión porque me gusta mi profesión aunque ahora económicamente no necesitaba correr, pero sí quiero hacerlo bien. Así que mañana me voy a Italia a pasar reconocimientos médicos y luego a Bélgica para planificar el calendario de carreras y recoger la bicicleta y el material. Estoy en condiciones ya de salir con un dorsal en carrera y defenderme.
-¿Qué siente al fichar por el BMC?
-Mucha alegría y una motivación extra porque que llego a un equipo, que junto al Sky, dispone de las infraestructuras más modernas, con más presupuesto y con más medios del panorama mundial. Quedas impresionado cuando sabes que tienen cinco directores deportivos, cuatro jefes de prensa, otros tantos jefes de operaciones, dos cocineros y también quince masajistas y otros tantos mecánicos. Con tantos medios se pueden estudiar bien las cosas en alimentación y preparación, se tiene todo controlado y así se logran mayores rendimientos.
-Pasará de ser jefe de filas del Euskaltel a tener de compañeros a campeones del mundo, del Tour, del Giro y de clásicas.
-Será bueno convivir con gente con veteranía que ganó ya casi todo como Evans, Gilbert, Hushvod y también con jóvenes con mucho futuro como el hijo de Zabel, Van Gaarderen que tiene en su piernas un Tour y también con otros especialistas en trabajar para los líderes. Cada uno sabe lo que tiene que hacer en el equipo y en carrera.
-Igual le toca ahora hacer de gregario.
-Ahora estoy motivado como si empiezo de cero a todos los niveles. Nunca tuve problemas si me tenía que sacrificar por un compañero para que ganara como ya hice e incluso en la selección española di medallas a compañeros en los Mundiales. También sé como piensa un gregario. Lo principal es que estoy ilusionado porque fichar por el BMC es como si lo haces por el Madrid o Barcelona en fútbol o correr con Ferrari y McLaren en Fórmula 1. Luego en carretera ya actuaré yo.
-Contador dijo que lo quería para su equipo.
-Mantengo una amistad muy grande con Alberto y siempre comenté que me gustaría estar de compañero de uno de los mejores ciclistas de la historia. Tenemos mucho parecido en la forma de correr y de hecho ya lo practicamos en etapas del Tour, pero también es cierto que salvo en la selección española siempre fuimos rivales.
-¿Es verdad que con la llegada de un nuevo patrón se estropeó la operación porque ya tenía hasta su bicicleta hecha.
-Hemos mantenido conversaciones en su momento, pero nada más. También se dijo que ya me tenían una bici preparada a mi medida. Pero en 2014 ya no puede ser ya, a ver si es en 2015 porque ahora solo tengo contrato de momento por este año.
-¿Qué le gustaría correr?
-Hasta que no vaya a Bélgica no sé nada. Claro que me gustaría disputar clásicas como las de otros años, también la Vuelta al País Vasco y volver al Giro de Italia porque cuando estuve no pude rendir tanto como yo esperaba. Y por supuesto si el seleccionador Mínguez cuenta conmigo estar en el Mundial. Luego a más largo plazo entrar en el equipo de Fernando Alonso si me dan esa oportunidad y también retirarme en los próximos Juegos Olímpicos. Pero lo principal es que ahora tengo el gran regalo de correr en este equipo.
-¿En este tiempo que estuvo sin encontrar equipo tuvo que llamar a muchas puertas?
-De todo esto se encarga mi representante, Jon Lauka, que me volvió a poner en el mercado y si ahora estoy corriendo es gracias a él. Otra cosa es que tengo muy buena amistad con campeones nacionales y extranjeros y se estuvo hablando de mi caso pero los equipos a esas alturas están completos.
-A los españoles les toca también buscar hueco en equipos del extranjero.
-Cada vez hay más paro y se quedan muchos ciclistas buenos sin poder correr y otros tienen que buscar el oficio fuera. Yo me había propuesto pasar este año corriendo y después de mucho esperar se logró que entrara en uno de los mejores equipos del mundo.
-Así tiene más opciones para formar parte del equipo de Fernando Alonso en 2015.
-Claro que me gustaría entrar en ese grupo y sería bueno también para el ciclismo asturiano ese equipo porque en esta tierra tenemos una afición extraordinaria.
