"La meta de estar en el play-off no me la marca el club, me la marco yo", sentenció ayer el entrenador del Marino de Luanco, Adolfo Pulgar, en su presentación oficial con su nuevo club, que se celebró en el restaurante La Pradera Campanal. El técnico ya está trabajando junto al presidente del club luanquín, Luis Gallego, en la preparación de la próxima temporada. "Uno no se puede esconder de la responsabilidad que da la historia del Marino. Cuando uno viene aquí sabe que es para estar entre los cuatro primeros y una vez que lleguemos ahí luchar por el ascenso. Sé las exigencias que hay y esa es una de las razones por las que vengo", afirmó Pulgar.

Lo primero que quiso desatacar el técnico en su presentación fue el equipo que le rodeará en el banquillo: "Quiero dar importancia al cuerpo técnico que tengo. Soy profesor en la escuela de entrenadores y veo que la gente joven está progresando muchísimo y rodearme de gente joven, como Marco Fernández, el preparador físico, es muy importante", señaló el entrenador, que no dejó pasar la oportunidad de alabar al resto de su cuerpo técnico: José Luis Argüelles, que sigue como entrenador porteros; Tivo, como ojeador, y Dani, el delegado. "El trabajo en equipo es lo que saca adelante esto y es lo que voy a hacer", sentenció.

El reto de volver a llevar al conjunto luanquín al play-off no le asusta, ni mucho menos: "He pasado por banquillos muy exigentes. El Marino sí que tiene esa historia en Segunda B, es especial como club, pero el banquillo no me va a pesar con los años que tengo. Soy un privilegiado porque puedo hacer lo que me gusta y vengo a disfrutar", explicó el técnico.

Su forma de trabajar también quedó clara: "Soy una persona abierta y espero integrarme en el pueblo, porque somos una familia. Lo que pasa que tengo un método de trabajo visceral, voy por un camino y hay que seguirlo y el que se salga de él pues no me gusta. Al Marino tiene que venir todo el mundo a sumar, nadie a restar", explicó. Sobre la confección de la plantilla, afirma que hay cosas que mejorar, pero también jugadores que pueden seguir pues "el equipo fue de menos a más y se repuso cuando nadie contaba con él".

Luis Gallego está encantado con la incorporación: "Para mí traer a Pulgar es un descanso. Respetando y apreciando a todos los entrenadores que han pasado por aquí, siento un poco de nostalgia de todos, pero un poco más de Quirós. Como presidente lo que tengo que hacer es rodearme de la mejor gente y por eso espero tener unos cuantos años aquí a Pulgar", señaló el presidente del Marino. "El presidente a todo lo que diga Pulgar, que tomará las decisiones, le va a decir que sí", añadió.