Ya se van conociendo detalles del gran acontecimiento del verano: la fotografía de la paz de Las Rozas entre el exseleccionador nacional Vicente del Bosque, marqués de Del Bosque, y el, se supone, todavía capitán de la selección nacional de fútbol Iker Casillas fue realizada a instancias de éste, autor de la llamada que provocó el encuentro de los protagonistas de la ruptura más sonada de los últimos tiempos. La ruptura ha quedado en nada, en un simple desencuentro, y los dos protagonistas han firmado la paz, con el seleccionador pidiendo perdón por las emisoras, y el portero, callado, quizá consciente de que ha ganado la pequeña batalla.
Mientras, otro de los capitanes de la selección en los mejores días, Xavi Hernández, ha lanzado un mensaje claro: no quiere a Joaquín Caparrós al frente del equipo nacional. Confiesa que le gustan los estilos de Paco Jémez, Míchel y Lopetegui, candidatos en la penumbra. No quiere a Caparrós ni a José Antonio Camacho, de quien se dice que es el candidato de Del Bosque, que seguirá en la Federación, aunque con cargo aún por determinar. Xavi Hernández habla, sin duda, por boca del sector barcelonista de la selección; es decir, por Piqué, Iniesta, Jordi Alba, Bartra y quizá Pedro, en la emigración londinense. Un mensaje claro y nítido frente a la apuesta de Sergio Ramos, el hermano de René, por Joaquín Caparrós. Duelo en la alta sierra.
La selección española, damas y caballeros, señoras y señores diputados, está metida en estas batallas mientras portugueses y galeses se esperan para las nueve de la noche de hoy en la primera semifinal de la Eurocopa. Una semifinal que, como todas, no tiene pronóstico posible dado el momento de los dos equipos, liderados ambos por los dos grandes símbolos del florentinismo madridista. Cristiano y Bale se van a encontrar por vez primera frente a frente en un duelo de alto nivel. El que gane jugará la final, la segunda de esta temporada cargada de lustre para ambos, que en enero estaban a punto de ser lanzados al foso de los leones por la penosa marcha de su equipo, que luego luchó por la Liga hasta el último partido y que se proclamó campeón de Europa.
En los amplios territorios rojiblancos se anuncia una aceleración de las incorporaciones de los fichajes necesarios para configurar la plantilla de la consolidación del Sporting en Primera, el gran objetivo de la temporada que se va acercando. Tanto se acerca que el lunes los jugadores se ponen a las órdenes del gran timonel. Por lo visto se quiere que el entrenador tenga bastante gente a sus órdenes porque en seguida vendrán los amistosos de pretemporada en los que el aficionado va poniendo los ojos para intuir por dónde va a ir el equipo cuando dé comienzo la temporada oficial.
Para la cita del lunes se anuncian novedades de relieve en la lista de convocados. A ver si son ciertas. Lo que se da por seguro es que ninguno de los nuevos jugadores tendrá que llegar en taxi desde Córdoba tras viaje nocturno, viaje que protagonizó nada menos que un tal Enzo Ferrero Águila (todos en pie), que con un corto descanso jugó medio amistoso en el que deslumbró a la concurrencia. Qué tiempos.
