Fernando Fernández-Kelly es el nuevo presidente de la Cámara de Comercio de Oviedo, tras largas e intensas horas de negociaciones que permitieron llegar a una candidatura de consenso. Su contrincante, Alfredo García Quintana, que contaba con el respaldo, entre otros, de la hostelería y el turismo -sector al que pertenece-, es el vicepresidente primero del organismo cameral. "Lo más importante es el esfuerzo realizado por todos para recuperar la unidad, que era el primer reto que teníamos por delante", aseguró Fernández-Kelly tras su elección con 50 votos a favor y sólo uno en contra.

El empresario y presidente de la compañía Advase sustituye en el cargo a Severino García Vigón, quien según confirmaron distintas fuentes, impulsó la negociación entre ambos candidatos. Fue el jueves por la tarde, cuando les telefoneó y les convenció de la necesidad de que negociaran para alcanzar un acuerdo.

Fernández-Kelly y García Quintana ya habían conversado en alguna ocasión anterior, pero sin llegar a plantearse una candidatura única. "Más bien era para ver qué posibilidades había de que uno de los dos no se presentase", explicó una de las fuentes consultadas. El talante en las conversaciones del jueves y de ayer mismo por la mañana fue, sin embargo, distinto. "Al contar los 'soldados', había un riesgo real de que las cosas estuvieran bastantes igualadas, porque el voto es secreto. Se podría haber reproducido lo que ocurrió en las elecciones de la FADE y entonces sí hubiera habido una clara ruptura", relató otra fuente.

El nuevo presidente cameral insistió en remarcar la importancia del acuerdo y la "generosidad, el esfuerzo y la gran responsabilidad" de García Quintana, con el que mantiene "buenas relaciones personales y profesionales". Y añadió que "lo que ha ocurrido es lo más razonable, no tendría sentido lo contrario".

Fernández-Kelly rechazó hablar de continuidad o de ruptura. Incidió en que "se trata de hacer una renovación tranquila. Una vez que hemos conseguido la unidad, vamos a hacernos con el conocimiento interno de la organización. Hay que mantener lo que hay, que es magnífico, y desarrollar otras actividades" que derivarán de la nueva ley de Cámaras de Comercio y que se centrarán en la formación dual, el comercio exterior y la mediación civil y mercantil. "Tendremos que hacer una adaptación interna y externa ante la nueva situación económica y la nueva ley. Pero lo haremos todos juntos, lo que ya es una ventaja", aseveró el nuevo presidente.

Severino García Vigón, que dimitió el pasado 31 de marzo tras conocerse que será juzgado, junto a dos de sus hijos, por presunto delito fiscal, aguardó en el despacho como presidente en funciones hasta la elección de su sucesor. Y hasta allí se desplazó Fernández-Kelly nada más finalizar la sesión plenaria para saludarle, incluso con cierta efusividad. "Gracias por los muchos años dedicado al mundo empresarial asturiano, un tiempo y una labor dignos de agradecimiento y de admiración", le dijo. Tras un nuevo abrazo, García Vigón indicó que su sucesor fue miembro de su primer comité ejecutivo, hace doce años, cuando Fernández-Kelly presidía la Asociación de Jóvenes Empresarios (AJE).

El nuevo comité ejecutivo se reunirá por primera vez tras las vacaciones de Semana Santa. "Todos vamos a trabajar en la misma dirección", remarcó el nuevo presidente de la Cámara, que cuenta con el arrope de la patronal FADE.

El órgano de dirección está integrado por nueve miembros, además del presidente y el vicepresidente primero. Y muchos de ellos repiten, aunque habían dimitido el pasado día 31 de marzo al mismo tiempo que Severino García Vigón "por solidaridad". La nueva lista, elaborada por consenso y que salió adelante con 48 votos a favor y una abstención, tiene varias curiosidades.

Una de ellas vino provocada por la permanencia, o "no dimisiones", de los representantes de FADE. Sólo dimitieron Severino García Vigón y Miguel Ángel Fernández (Cajastur), pero los otros cinco se mantuvieron. En el pleno de ayer, Fernández volvió a ser miembro del pleno y ha vuelto a entrar en el comité ejecutivo. También sigue María Antonia Álvarez, presidenta de la Asociación Empresa Mujer (ASEM). Y repiten Laura Pérez Fernández, José Manuel Cabielles, y Emilio Fernández Corral, que tiene su particular historia, porque fue el único que no dimitió junto a sus compañeros al mismo tiempo que García Vigón.

El vicepresidente segundo en esta nueva etapa es Nicanor Fernández (HC), quien ya había estado en el comité ejecutivo cameral con Severino García Vigón y que había dimitido cuando éste se negó a marcharse de FADE y de la Cámara tras descubrirse que estaba siendo investigado por Hacienda. Las otras caras nuevas son Jesús Fernández Jardón, Luis Valdés y Felipe Sordo.