Madrid
Los peritos policiales, de la Guardia Civil y los que representan a las diferentes partes personadas en el juicio por la masacre del 11-M disponen de material procedente de todos los focos de explosión en los trenes y en otros escenarios de la investigación para realizar su nuevo informe sobre el explosivo empleado, informaron ayer fuentes jurídicas.
De no haber hallado muestras suficientes, los expertos deberían haber entregado el pasado sábado a la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional un informe completo sobre el material no localizado. Este documento debería aclarar si la carencia de muestras se justificaba por el consumo de las mismas en pruebas anteriores o, simplemente, por el hecho de que los restos nunca se hubieran recogido.
Como no se dio esta circunstancia, los diferentes peritos tienen hasta las 15 horas de hoy para presentar ante el tribunal un borrador de informe, aunque éste no tenga un resultado unánime.
Con el fin de evitar «suspicacias» el tribunal ordenó que la nueva prueba fuera realizada por un conjunto de expertos en los que se incluía uno por cada parte que hubiera propuesto esta nueva prueba -la defensa del presunto autor material de los hechos, Jamal Zougam; la Asociación de Ayuda al 11-M y la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT)-. El resultado será valorado durante el juicio oral, que comienza el próximo jueves. El tribunal que juzgará el 11-M conocerá hoy el borrador del informe sobre la nueva prueba pericial de los explosivos.
El fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, cree «razonable» que el tribunal encargado del juicio del 11-M haya aceptado que testifiquen tres etarras y que se practique «una nueva pericial» de explosivos «para confirmar las pruebas» realizadas durante la instrucción del sumario. «Eso no supone deducir una posible vinculación de ETA con el 11-M», destacó, al explicar que esas dos pruebas, la de explosivos y la testifical de los tres etarras -Henri Parot y los dos que fueron detenidos once días antes de los atentados con una furgoneta cargada de explosivos en Cañaveras (Cuenca)- fueron propuestas por la defensa de dos de los principales acusados: Jamal Zougam y Basel Ghalyoun. El primero afirmó ayer a «El Mundo» que le acusaron de la masacre por negarse a trabajar para el Centro Nacional de Investigación. «Si hubieras colaborado con nosotros no te habría pasado esto. Entendí que era una amenaza», dijo.
Desde IU, Gaspar Llamazares dijo que el juicio del 11-M será el final de las «novelas de ciencia ficción». Jordi Jané, de CiU, pidió que no se difundan falsedades antes del fin del juicio y estimó que el sumario confirma que ETA no fue la autora de la masacre. Ayuda a las Víctimas del 11-M confió en que el juicio aclare las incógnitas.
El PSM-PSOE solicitó ayer a la fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que «acuerde la inmediata investigación» del vídeo sobre el 11-M que estuvo colgado en la web del PP de San Martín de la Vega, en el que «se imputan gravísimos delitos al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero», como que pactó con ETA para ganar las elecciones.
El portavoz popular, Antonio Beteta, acusó a la portavoz adjunta del PSOE, Ruth Porta, de generar «una membrana de distracción» por denunciar el vídeo ante la fiscalía. Beteta lamentó que Porta realice esta denuncia en lugar de «pedir disculpas por los continuos insultos» que, a su juicio, «lanza contra los diputados populares».
