El Gobierno desarrollará una ley de mediación y de jurisdicción voluntaria que permita que muchos de los asuntos que ahora son resueltos por vía judicial, como los matrimonios civiles o los divorcios de mutuo acuerdo sin hijos menores de por medio, puedan ser tramitados ante notario.

Así lo anunció el ministro Alberto Ruiz-Gallardón, para quien no tiene sentido que quienes se quieren divorciar «de mutuo acuerdo» y sólo necesitan «una constatación del mismo» no puedan hacerlo ante un notario y «tenga que iniciar un expediente judicial». «De la misma forma que los alcaldes pueden autorizar matrimonios, ¿por qué la única alternativa es llevarlo ante los funcionarios al Registro Civil y no que lo haga un notario?», se preguntó.

Esta reforma permitirá que «muchos asuntos atascados en los tribunales» se resuelvan rápidamente, con plena garantía ante otros funcionarios y otros organismos, dijo Gallardón. Ante la alta litigiosidad, el Ministro dijo que «hay actuaciones que podemos llevar a una mediación, a una jurisdicción voluntaria».

Gallardón aseguró que España puede estar «orgullosa» de su sistema notarial porque ofrece «seguridad jurídica». «Lo que tenemos que hacer es encargarles a esas personas muchas tareas que están colapsando los tribunales», subrayó. El Gobierno va a «establecer mecanismos» para anticipar la resolución de asuntos «importantísimos» que están retenidos «por ese atasco judicial», dijo el Ministro, quien advirtió de que no puede seguir «un sistema judicial pensado para el siglo XIX».

La reforma ha sido recibida con reparos por dos asociaciones de magistrados. La Francisco de Vitoria cree que las bodas y divorcios ante notarios costarán más y Jueces Para la Democracia considera que «no pueden quedar al dictado del mercado». Mientras, los secretarios judiciales aseguran que pueden asumir esos cometidos «con coste cero para la ciudadanía».

El Consejo General del Notariado dio su apoyo decidido a la reforma anunciada por el Ministro al día siguiente de que se le ofreciera para asumir nuevas funciones en jurisdicción voluntaria, arbitraje y mediación ante la grave crisis. Además de bodas y divorcios de mutuo acuerdo, los notarios piden intervenir en derechos reales, obligaciones, sucesiones y derecho civil. El consejo general de la abogacía también ofreció que los letrados medien en matrimonios y divorcios y puedan contribuir con los notarios a solucionar problemas sin pasar por los tribunales.