El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, cargó ayer contra el "ruido" y el "blablablá" que escenifican otras fuerzas políticas en las negociaciones para la investidura y pidió ir "a lo serio", que, en su opinión, consiste en intentar armar una "coalición a tres" (PP, PSOE y Ciudadanos), una "coalición del puro sentido común".

En un acto de NN GG del PP en Bilbao, Rajoy admitió que la corrupción le ha hecho "mucho daño" a su partido, y prometió combatirla, pero sin "condenar a un inocente", porque ha habido muchos casos, aseguró, que "terminaron en nada".

El líder del PP definió la etapa que vive la política española como la del "politiqueo y el postureo", con "mucho ruido" por parte de otros partidos, "muchas ruedas de prensa", reuniones, "mediadores" y mucho "blablablá".

E ironizó incluso al recordar que a él siempre se le ha criticado por dar pocas ruedas de prensa y ahora hay "gente inagotable" con comparecencias que "duran horas" y en las que "dicen nada hablando más de la cuenta".

Así que pidió a quienes negocian en estos momentos que vayan a "lo serio", es decir, que presenten un programa de gobierno y busquen los apoyos. Y si no lo consiguen, "no pasa nada", porque "hay tiempo por delante" y las leyes y la Constitución "dicen lo que hay que hacer cuando nadie logra el apoyo mayoritario de la Cámara", en referencia a las nuevas elecciones que el jueves, en Bruselas, dio casi por hecho que tendrán que celebrarse el próximo 26 de junio.

Precisamente en la capital comunitaria, al término de la cumbre de la UE, Rajoy dejó claro el viernes por la noche: "Si se produjeran elecciones quiero ser el candidato del PP. Lo he sido en las últimas, hemos ganado con una diferencia de más de 1,7 millones de votos sobre el segundo y con 33 escaños por delante".