El porcentaje de los catalanes contrarios a la independencia aumenta de forma lenta pero continuada, según constata el barómetro de opinión de la Generalitat. El 48,5 de los encuestados por Centro de Estudios de Opinión (CEO), el CIS catalán, en su sondeo trimestral son partidarios de mantener el vínculo con España. Superan en 4,2 puntos a los favorables a la secesión, un 44,3 por ciento. Estos resultados suponen ampliar las diferencias porcentuales respecto al último sondeo de diciembre, en el que las dos opciones se encontraban en situación de empate técnico.

El mismo sondeo revela que el 50,3 por ciento de los encuestados apoyaría un referéndum sobre la independencia de Cataluña, sea o no con el acuerdo del Estado. Los que se movilizarían para ir a votar en una consulta unilateral serían más: el 73,4 por ciento.

La encuesta incluye también intención de voto y, en este apartado, anticipa que está en peligro la mayoría parlamentaria que ahora sustenta al Ejecutivo de Puigdemont. Junts pel Sí (PDeCAT y ERC) obtendría entre 58 y 60 diputados si hubiera elecciones al Parlament, por debajo de los 62 que tiene, y la CUP se quedaría en ocho diputados, con lo que peligraría la mayoría absoluta, 68 escaños, de los independentistas, según el sondeo del CEO.