Agentes de la Policía Local procedieron esta tarde al precintado y clausura del mercado Pirata que se desarrollaba en el gijonés paseo de Begoña y que estaba previsto que durase hasta el domingo.

El Ayuntamiento decidió cerrar el mercado tras enterarse de que los organizadores incumplían con la licencia al haber un exceso de puestos sobre los permitidos en la misma y un exceso de ocupación de la vía pública.

Artesanos y comerciantes, llegados de diferentes puntos de España, aseguraron sentirse "engañados" y "estafados" por los organizadores del mercado. Éstos, por su parte, alegan que "se trata de una equivocación" y que "no sabíamos que no podíamos ocupar más allá de la calle Anselmo Cifuentes". Asimismo, piden "comprensión" al Ayuntamiento.

Los organizadores han procedido a reembolsar a algunos dueños de los puestos el dinero que pagaron por participar en el mercado, aunque su intención es reabrir mañana con el número de puestos adecuado a la licencia.