La Fundación Municipal de Servicios Sociales de Gijón atendió a lo largo del año pasado un total de 180 órdenes de protección y medidas de alejamiento en favor de mujeres víctimas de violencia de género. Se trata de una intervención ligeramente inferior a la del año precedente, el 2016, cuando se atendieron 192 órdenes dictadas con respecto a mujeres víctimas de violencia machista con residencia en Gijón.
Así lo constatan los datos de la última memoria de actividad de la Fundación, a la que llegan las resoluciones judiciales en este sentido desde el Punto de Coordinación de Órdenes de Protección dependiente del Instituto Asturiano de la Mujer, así como de la Oficina de Políticas de Igualdad del Centro Asesor de la Mujer de Gijón, desde donde se realiza el seguimiento de los procedimientos judiciales. El total de demandas de derivación recibidas en 2017 en la Oficina de Políticas de Igualdad fue de 146, para atender información sobre prestaciones, ayudas a la vivienda o atención telefónica.
La mayor parte de las resoluciones judiciales se recibieron en el segundo y tercer trimestre del año, y aunque hay un ligero descenso en el número de órdenes de protección, sigue siendo un fenómeno de gran magnitud que preocupa mucho en la Fundación.
El rango de edad de las mujeres con órdenes de protección fue el año pasado muy amplio, según los datos de Servicios Sociales: se han registrado casos entre los 15 y los 85 años. Dos casos se correspondieron a menores de edad, y el tramo en el que hay más mujeres en esta situación de necesidad de protección es el que va de los 35 a los 39 años. Las mujeres mayores de 25 años y las menores de 44 años suponen un 62,22 por ciento del total. Además, la Fundación Municipal destaca un año más la incidencia de los casos en mujeres cada vez más jóvenes, que suponen el 36,67 por ciento del total (las comprendidas entre los 18 años o menos, hasta los 34 años de edad).
En cuanto a la relación de las víctimas con las personas denunciadas y en su caso condenadas por episodios violentos, lo más habitual es que se tratara de su pareja de hecho y de compañeros sentimentales, y atendiendo al lugar de nacimiento, la gran mayoría de las mujeres que recibieron en Gijón una orden de protección son de nacionalidad española: un 86,19 por ciento, mientras que un 13,81 por ciento son de otras nacionalidades.
