Teherán / Oviedo

Las autoridades de Irán advirtieron ayer de que no habrá «misericordia» con los detenidos por romper una foto del fundador de la República Islámica, el ayatolá Ruholá Jomeini, durante una de las manifestaciones antigubernamentales celebradas el pasado lunes día 7.

Las detenciones, cuyo número exacto se desconoce, se produjeron el mismo día que los hechos, aunque no trascendieron hasta ayer. Un responsable judicial explicó que los presuntos culpables, a los que no identificó, «han sido encarcelados y serán procesados en el plazo más breve posible».

Por otra parte, los tres ciudadanos estadounidenses detenidos en Irán y acusados de espionaje serán sometidos a juicio, según anunció el ministro de Exteriores iraní, Manuchehr Mottaki. Los tres fueron detenidos tras entrar en Irán, después de haberse perdido, desde el norte de Irak, a finales de julio. EE UU no considera que haya pruebas para respaldar ningún cargo contra las tres personas.