Una serie de tornados han arrasado parte del estado de Oklahoma dejando al menos cinco muertos y más de 50 heridos. Los tornados hicieron volar los techos de las casas, derribaron paredes y arrancaron árboles de raíz dejando un paisaje desolador. A su paso han derribado también postes eléctricos y numeroso mobiliario urbano.

Según las autoridades medio centenar de viviendas han quedado totalmente destruidas y 40.000 hogares están sin luz.

Los ciclones se desplazan ahora hacia el estado de Kansas.