Líderes políticos de todo el mundo destacaron ayer el calado histórico de Fidel Castro y su rechazo a la dominación externa. Todo fueron mensajes cargados de elogios, excepto los pronunciados en Estados Unidos. Tanto el actual presidente, Barack Obama, como el nuevo dirigente electo, Donald Trump, sacaron a la luz las sombras de una figura que "alteró el curso de la vida de muchas familias". El republicano fue más duro en su intervención y calificó al político cubano de "brutal dictador". En España, la noticia de su fallecimiento fue recogida con respeto "por la gran cercanía entre nuestro país y Cuba".

El Rey Felipe VI envió un telegrama de pésame al presidente de Cuba, Raúl Castro, en el que expresó se trata de "una figura de indiscutible significado histórico". En el texto enviado, el Rey recuerda "muy especialmente" los "lazos familiares y vínculos con España" de Fidel Castro, y añade que "la gran cercanía entre Cuba y España hace que todo lo que afecte a Cuba se sienta como propio en España". "Con este cariño compartido por ambos pueblos, cubano y español, reciba mi más sincero pésame extensivo al Gobierno y a las autoridades de Cuba", concluyó.

El presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, destacó ayer el "calado histórico" del líder revolucionario Fidel Castro, que estuvo al frente de Cuba desde 1956 hasta 2008. En las redes sociales, Rajoy escribió el siguiente mensaje: "Mis condolencias al gobierno y autoridades cubanas por el fallecimiento del expresidente Fidel Castro, una figura de calado histórico".

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, subrayó, tras el fallecimiento de Fidel Castro, que a todos los revolucionarios del mundo les "toca seguir con su legado" y afirmó que el líder cubano y el expresidente venezolano Hugo Chávez "dejaron abonado el camino de la liberación de nuestros pueblos". En varios mensajes, Maduro anunció que había hablado con el presidente cubano, Raúl Castro, para transmitir la "solidaridad y el amor al pueblo de Cuba ante la partida del comandante Fidel Castro". Asimismo, dijo que el líder cubano "hizo historia junto a los pueblos del mundo para señalar un camino de dignidad con los principios de Bolívar y Martí".

El presidente de Francia, François Hollande, describió a Castro como "figura del siglo XX" y representante de las luces y de las sombras de la Revolución en la isla. "Fue el receptáculo de la Revolución Cubana, tanto de las esperanzas que suscitó como de la desilusión que acabó generando", según expresó en un comunicado. "Fue capaz de representar", no obstante, "el orgullo de los cubanos en su rechazo a la dominación externa". "Francia siempre ha rechazado el embargo impuesto por Estados Unidos y ha aplaudido el aperturismo y el diálogo restablecido entre ambos países", agregó el presidente de la República.

El partido de Podemos se refirió a Fidel Castro como un líder "para todos los pueblos de América Latina, las luchas descolonizadoras de buena parte de África y todas aquellas luchas por la soberanía de las últimas décadas". "Patria, dignidad, emancipación, justicia social: son todos significantes de un legado que está hoy por repensar y analizar, con rigor y espíritu crítico, huyendo de hagiografías", señaló Iglesias.

El presidente de EE UU, Barack Obama, afirmó que la historia "registrará y juzgará el inmenso impacto" de la "singular figura" que fue el fallecido líder cubano. En un comunicado divulgado por la Casa Blanca, Obama quiso extender "una mano de amistad al pueblo cubano". Obama reconoció que la muerte de Castro es, para los cubanos de la isla y de EE UU, un momento de "emociones poderosas", de recordar "las innumerables formas" que en el líder de la revolución "alteró el curso de vidas individuales, familias y de la nación cubana".

El Gobierno de Ecuador calificó de "grande" y de "gigante" al líder cubano, Fidel Castro. "Se fue un grande. Murió Fidel. ¡Viva Cuba! ¡Viva América Latina!", escribió en su cuenta de Twitter el presidente ecuatoriano, Rafael Correa. También el canciller de ese país andino, Guillaume Long, lamentó el fallecimiento de Castro: "Infinita tristeza por fallecimiento de Fidel. Abrazo eterno a pueblo cubano en este momento de dolor y desconsuelo. El mundo llora un gigante".

El presidente de México, Enrique Peña Nieto, calificó al líder cubano de "referente emblemático del siglo XX" y de "gran amigo de México". "Fidel Castro fue promotor de una relación bilateral basada en el respeto, el diálogo y la solidaridad", señaló.