La cúpula del Partido Social Demócrata de Alemania (SPD) se ha comprometido a ejercer presión sobre la canciller alemana, Angela Merkel, y su partido, la Unión Demócrata Cristiana para que mejore determinados aspectos de la hoja de ruta que llevaría a ambos partidos a repetir un Gobierno de gran coalición. Los dirigentes socialdemócratas tratan de convencer así a los sectores escépticos del partido, que podrían torpedear las negociaciones.

Los líderes de SPD deben convencer del trato a los miembros del partido antes de un congreso el 21 de enero, en el que los delegados votarán sobre el pacto preliminar firmado el viernes. Sólo entonces podrán avanzar con negociaciones formales.