El nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Navia es visto como un avance por el sector inmobiliario y de la construcción. "Hay bastante gente esperando a que se apruebe para comenzar a construir su vivienda", apuntan los empresarios, quienes consideran que el nuevo ordenamiento "se adapta a los tiempos y a la sociedad actuales". Consideran, además, que las normas existentes hasta la fecha se habían quedado obsoletas, y que esta normativa impulsará la demanda de terrenos y viviendas.
Uno de los principales avances de este documento, aprobado de forma provisional esta misma semana, concierne a la zona rural, donde se elimina la superficie mínima para construir. Basta con cumplir la separación legal con caminos y vecinos, y tener tres metros a vial existente. "En los núcleos rurales se va a poder dar un mejor aprovechamiento del suelo, dentro de un orden y sin que se produzca una masificación", apunta la agente inmobiliaria Natalia González.
Por su experiencia, González asegura que en estos últimos años "ha sido difícil levantar nueva vivienda unifamiliar en el concejo, por lo que se ha dado una fuga importante a municipios vecinos". El nuevo ordenamiento favorecerá la construcción en un momento, dice, "en el que crece la demanda, pero los precios siguen en un ligero descenso en Navia".
Natalia González considera que "se trata de un buen plan, que se adapta a la situación actual de la demanda de suelo de Navia. La sociedad evoluciona y la normativa del suelo debe evolucionar con ella. Las normas estaban obsoletas desde hace un tiempo", dice la empresaria.
En la villa de Navia, que se ve limitada en su crecimiento tanto por la ría de como por la línea de costa, el plan incrementará el suelo urbano hacia dos puntos. Por un lado, hacia la localidad de Andés, por la zona de Villalonga y su continuación, donde se permitirá levantar edificios. También en dirección al cementerio, en la zona de Las Cortes. Allí, la vía del tren supone, además, una barrera física.
Sin embargo, por el momento no se detecta una carencia acuciante de terreno para levantar edificios en zona urbana. "En el casco urbano tenemos suficiente terreno, principalmente en la zona de El Ribazo. Ahora se vende muy lentamente", asegura un promotor y constructor local, que reconoce que "hay que olvidarse de la avalancha que hubo hace unos años". En su opinión, el nuevo plan sí fomentará la construcción, pero de una forma progresiva. "Ahora la gente se lo piensa mucho. Y la segunda vivienda ha caído bastante", añade. Este empresario también ve el beneficio para los propietarios: "El vecino que antes tenía un terreno para una vivienda, ahora quizás puede levantar dos, y lograr más ingresos", apunta.
En el apartado del suelo industrial se han sumado metros en la zona de Villapedre y en el polígono de Salcedo-La Colorada. Se trata de puntos con una buena conexión de salida hacia la Autovía del Cantábrico, y se espera que en ellos sea posible fijar nuevas empresas.
También se habilitará un área reservada a grandes superficies comerciales. Hace años, antes de la crisis, hubo interés por parte de varios promotores para instalar este tipo de equipamientos en el concejo. Ahora ese interés parece haber decaído, pero el equipo de gobierno quiere estar preparado, y tener dispuesto el ordenamiento, por si esa alternativa puede ser real en un futuro.
El PGOU debe ser revisado por la la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio del Principado de Asturias (CUOTA). Este organismo se encargará de volver a analizar el plan al completo, y también las alegaciones, que deberá responder en cuestión de meses.
