Mantener durante más tiempo los controladores de tráfico en la carretera, para evitar atascos, está bien, pero los lagos de Covadonga necesitan "un buen lavado de cara". Es la conclusión a la que llega el presidente de la Asociación de Empresarios de los Picos de Europa (Incatur), José Antonio Sánchez, que reclama con urgencia la renovación de infraestructuras como la carretera de acceso o los aseos de la parte asturiana del enclave "para atender mejor las necesidades de los visitantes".
Sánchez celebra el compromiso del Principado de contratar a dos personas para regular el tráfico en las zonas del Enol y La Ercina durante los fines de semana comprendidos entre el 15 de mayo y el 5 de octubre en los que no esté operativo el plan de transporte a los Lagos, que impide el tránsito a vehículos particulares entre las 08.30 y las 20 horas por motivos medioambientales en vacaciones, puentes y festivos. "Estamos contentos porque la ampliación de la presencia de los controladores es algo que llevábamos tiempo reclamando. Todo lo que sea mejorar la imagen del parque nacional es bienvenido", afirma. "Estamos a la expectativa para ver si con sólo dos trabajadores se pueden solucionar los problemas de atascos que tan mala imagen dan a los visitantes. Nos parece que pueden ser pocos y que quizá sean necesarios al menos otros dos", apunta.
En cuanto a las asignaturas pendientes, el presidente de los empresarios hace hincapié en la necesidad de ampliar el horario de apertura de los puntos de información. "La gente tiene que estar bien informada, saber si la carretera va a estar cerrada o no y el tiempo aproximado de espera para acceder a los Lagos", explica. Otra de las reivindicaciones es, por ejemplo, la de mejorar la señalización de la rutas. "También es necesario mejorar los baños. Muchas veces los turistas que llegan se encuentran con que están cerrados o fuera de servicio, y ya están viejos", apostilla Sánchez.
En cuanto al anuncio del Principado de invertir 972.000 euros para mejorar el tramo que une Covadonga con Buferrera una vez que finalice el verano, Sánchez considera que "llega tarde y la obra ya debería estar acabada". "Si viene un mal invierno nos vamos a plantar en 2018 con la carretera en mal estado", lamenta el presidente de los empresarios de los Picos de Europa.
