D. ORIHUELA
Es el número 96 de los 312 taxis que hay en la ciudad y, además, no tiene igual. El coche de Amable Amieva es el único que queda de los London Taxis que llegaron a Oviedo hace 9 años.
Amieva fue el primer taxista que condujo uno de estos modelos por las calles de la capital del Principado y también es el último. Es su segundo coche de estas características, con el primero recorrió 400.000 kilómetros y con éste ya ronda los 300.000, así que el resultado es, en su opinión, «óptimo». «El anterior es el mejor coche que tuve en los 33 años de taxista», afirma satisfecho. Entre los beneficios que destaca están las siete plazas del vehículo, el fácil acceso para los minusválidos y una pequeña modificación marca de la casa, «le he puesto un paragüero, algo que los usuarios agradecen mucho y que a mí me viene muy bien porque no manchan el coche con los paraguas».
El resto de los LTI (London Taxis International) dejaron de dar servicio en Oviedo, pero Amieva está convencido de que éste es el mejor modelo de taxi que se puede utilizar. Y ahora también el único, ya que el resto, los otros cuatro que circulaban por Oviedo, son pasado.
