David ORIHUELA
A menos de cinco meses para que se cierre el plazo de presentación de candidaturas a capital cultural europea de 2016, el próximo 12 de julio, el proyecto de Asturias -que liderará Oviedo, junto a Gijón y Avilés- parece caminar con evidente retraso. La propuesta asturiana es la única de las 16 candidatas españolas que carece de una campaña de promoción específica: no tiene página web oficial, aún no ha decidido cuál será el órgano encargado de elaborar, defender y gestionar el proyecto y no tiene cerrado su presupuesto. El Principado habla de unos 500.000 euros, un presupuesto que, por ejemplo, Santander multiplica por nueve sólo este año, con 4,5 millones, con el apoyo decidido del Banco Santander. Las ciudades rivales protagonizan desde hace meses -incluso años, como es el caso de Córdoba, favorita a priori junto a San Sebastián y Cáceres- potentes campañas de información y publicidad.
El Gobierno regional se reunirá el próximo jueves con responsables de los ayuntamientos de la triada asturiana, Oviedo, Gijón y Avilés, para decidir definitivamente si se presenta la candidatura. A partir de ahí se fijará el modelo de gestión, un órgano en el que «estarán representadas a partes iguales las cuatro administraciones implicadas», según señaló ayer el viceconsejero de Cultura, Jorge Fernández León.
A pesar de la ausencia de promoción, la candidatura asturiana lidera el ranking de votos de los internautas en la página oficial de la asociación de las ciudades candidatas. Los plazos de la Asociación de Ciudades Candidatas a la Capitalidad Europea de la Cultura marcan que en julio deben presentarse en el Ministerio de Cultura todas las candidaturas. A finales de este año se producirá el primer corte, en una decisión del Gobierno central y sin que aún se sepa cuántas propuestas quedarán. Ya en 2012, la UE designará cuál será la ciudad que ostente el título de capital cultural a lo largo de 2016, una distinción que se compartirá con una ciudad polaca.
La candidatura asturiana ha sido el centro de la polémica esta semana tras el anuncio de abandono de Oviedo lanzado el martes por el alcalde, Gabino de Lorenzo, que fue rectificado el jueves luego de que el Gobierno regional, Gijón y Avilés arremetiesen contra De Lorenzo.
