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Los médicos de La Corredoria aseguran que llegan a atender a 120 pacientes al día

La espera para el fisioterapeuta es de siete meses y sólo hay matrona tres días a la semana, denuncia el personal del centro

El de ayer no fue uno de los días con más pacientes que atender y aún así en las salas de espera del centro de salud de la Corredoria no sobraba mucho sitio. En los días de mayor carga asistencial los médicos aseguran que han llegado a atender a sesenta enfermos por la mañana y si hay programada una guardia a otros tantos por la tarde, 120 en total.

En La Corredoria hacen falta un par de médicos, una enfermera, un fisioterapeuta, una matrona, un dentista y un higienista dental. Algunos de esos servicios, como la atención bucodental, son compartidos con otros centros, como Teatinos.

Los responsables del Servicio de Salud del Principado conocen la situación, han visitado varias veces las instalaciones y se han reunido con el personal. Había un compromiso para que la plantilla se ampliase este año, con la llegada de un médico en enero -luego esa promesa se trasladó a marzo- y la del resto de los trabajadores que hace falta a lo largo del año, pero los meses pasan y nadie se incorpora.

Ante esa situación los médicos y el resto de los profesionales del centro de salud de La Corredoria estaban decididos a principios de semana a sacar sus reivindicaciones a la calle y concentrarse a las puertas del edificio, Finalmente desistieron, trasladaron sus demandas a la sociedad y dieron una última oportunidad a la Administración.

La mayoría de los médicos y sanitarios evita dar su nombre. No es el caso de María Fernández, una de las pediatras del centro, que explica que cada uno de los tres de los que dispone el centro tiene a su cargo a 1.165 niños - el cupo óptimo es de 900-. Ven unos 45 críos cada día y la cifra se mantiene de enero a diciembre. "La de este centro de salud es una población muy demandante", comenta y añade la media de nacimientos en el barrio es de 300 al año. Con esas cifras, dice, "simplemente el programa de vacunación es una carga insufrible".

El fisioterapeuta, refieren los trabajadores del centro de salud, sólo acude dos días a la semana y acumula siete meses de espera. La matrona es compartida con Grado y sólo está tres jornadas semanales. Tampoco van sobrados de personal de administración, que sobrevive "totalmente en precario". Y ahora, con la cercanía del verano, se ponen en lo peor, porque saben de sobra que las bajas (actualmente hay dos), los permisos y las vacaciones no se cubren.

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