La Facultad de Turismo dio ayer la bienvenida a sus alumnos a un curso que da inicio a una nueva etapa del centro académico, que abandona la denominación de Escuela Universitaria. Unos cuarenta alumnos del Grado de Turismo, junto con el claustro de profesores, se dieron cita en la jornada de bienvenida, donde los estudiantes de primer año conocieron la que va a ser su nueva vida universitaria.

En el acto, la Decana de la facultad, Covadonga Vigil, hizo hincapié en el inicio de un nuevo ciclo bajo la renovada denominación: "por fin, en un país donde el turismo es un sector clave y en crecimiento de la economía, se ha reconocido la importancia de estos estudios dándoles el carácter de grado". "El sector turístico está en cambio continuo y necesita una formación constante pero asegura un futuro profesional tanto en España como en los países en vías de desarrollo, donde el turismo es un pilar de la economía", explicó Vigil a los alumnos.

Estos nuevos estudiantes superaban en número a los del curso pasado y asistieron, expectantes y nerviosos, a la bienvenida. El director académico del centro, Fidel Cedeño, explicó detenidamente las normas de permanecía en la universidad que tanta polémica han desatado este verano entre el alumnado de la Universidad de Oviedo.

El ovetense Pedro Comas, de 20 años, es uno de los nuevos matriculados tras cambiarse de Magisterio porque no le "gustaba". Probará ahora con Turismo "que es algo nuevo y ofrece más salidas laborales". Precisamente, el futuro profesional y las prácticas laborales fueron el centro del discurso de Marián G. Rúa, responsable del Departamento de Idiomas y Comunicación, que destacó los convenios con más de 500 empresas que facilitan el acceso al mundo laboral de los estudiantes. Rúa también destacó la dimensión internacional de la facultad que ofrece la posibilidad de obtener una doble titulación en las universidades de Macerata en Italia y el University College de Birmingham en Inglaterra.