Los padres del colegio de Las Campas que temen por la seguridad de sus hijos durante la ampliación del centro -a punto de comenzar- no están dispuestos a que los niños asistan a clase entre máquinas excavadoras y grúas, por lo que reclaman a la Consejería de Educación el traslado temporal de los alumnos a otro centro mientras duren las obras. Su primera opción sigue siendo aplazar al verano los trabajos de mayor envergadura (como el levantamiento del tejado y la instalación de la cubierta), pero las continuas negativas de la consejera, Ana González, han hecho que se planteen un cambio provisional.
La consejera está dispuesta a instalar cuatro módulos prefabricados (similares a los barracones de obra) en el patio del colegio para calmar la inquietud de las familias, que creen que los estudiantes no estarán seguros en un edificio en proceso de ampliación. Sin embargo, los padres rechazan esa posibilidad y argumentan, en una carta dirigida a González, que "sería mejor poner sólo dos módulos en septiembre, cuando la obra ya esté casi terminada, para acoger a los nuevos matriculados", y que la empresa constructora haga la obra en verano "cuando hay más horas de luz, hace mejor tiempo y no hay 400 niños corriendo por todas partes".
En el caso de que el Gobierno regional no ceda a ninguna de las pretensiones de los padres -ni al aplazamiento de los trabajos, ni al traslado temporal a otro colegio-, algunas familias no llevarán a los niños a clase. Así lo aseguraron algunos padres que dieron una rueda de prensa el 19 de noviembre arropados por representantes de todos los grupos con representación municipal, a excepción del PSOE, y con la miembros de la plataforma Podemos.
Algunos padres han constituido la Plataforma por el Aplazamiento de las Obras del colegio Juan Rodríguez Muñiz y ya han establecido un calendario de trabajo. La primera cita será esta tarde, a las 19 horas, en el centro de actividades de la Florida (calle Soto del Barco s/n) para analizar un posible traslado a otro centro o plantear otras posibilidades a Ana González. Además, el grupo prepara nuevas concentraciones ante la Consejería de Educación en los próximos días, como ya hicieron la semana pasada.
La empresa adjudicataria de las obras de ampliación del colegio, Oca Construcciones, entrará en el centro a mediados de diciembre para trabajar seis meses seguidos. Así lo estipula el contrato firmado con el Principado, que también autorizó la construcción de tres aulas en el gimnasio como medida temporal para escolarizar a los niños este curso. Las nuevas unidades estuvieron listas en un mes y actualmente acogen a unos 60 alumnos.
