"Abandonar el euro provocaría aislamiento del exterior, corralito financiero, empobrecimiento de la población y una reducción inmediata del tejido empresarial y económico". Así lo puso ayer de manifiesto Ignacio Blanco, abogado y economista, también secretario de Vox en Asturias, durante la conferencia "El impago de la deuda soberana. Desmontando el populismo", ofrecida en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA.

Blanco, que fue presentado por Rodolfo Espina, presidente de Vox en Asturias, denunció que la socialdemocracia ha venido "manteniendo el Estado del bienestar a base de emisiones de deuda que pagarán sus ciudadanos". A lo largo de su exposición, Blanco trató de demostrar cómo, a su juicio, los impagos de deuda pública que se han realizado a lo largo de la historia sólo han conducido al empeoramiento de la calidad de vida de sus ciudadanos y a su empobrecimiento económico.

También se refirió a los impagos de Rusia, Argentina e Islandia, para incidir en las consecuencias que esas decisiones han tenido en la vida de los ciudadanos. "En Rusia provocó que se dejasen de importar bienes de primera necesidad; en Argentina, la inflación subió un 167% en los últimos diez años, y en Islandia, tras el impago, deben aún más dinero que antes", recalcó.

Sobre las necesidades de financiación de la economía española, afirmó que todos los déficits provocan aumentos de la deuda pública "que recaerá sobre todos los españoles", ya que "el Gobierno actual viene gastando más de lo que ingresa sistemáticamente", añadió.

Ignacio Blanco no pasó por alto la "devastación" que ha supuesto para los ecuatorianos el Gobierno de Rafael Correa. En el país, desde el último impago de la deuda, en 2008, ya se debe el doble de dinero y el PIB, sin tener en consideración el precio de la energía, ha bajado a niveles del año 2007.