En la calle Altamirano abrían sus puertas dos bares clásicos de Oviedo, Casa Manolo y Lito. El último de ellos sigue dando de comer a los ovetenses y a los visitantes de la ciudad, con más de medio siglo de solera.

La casa de comidas empezó llamándose "Las Delicias". Hasta 1956, año en el que se hizo cargo de ella Manuel Suárez Fernández -el Lito que a partir de entonces le dio nombre- el establecimiento tuvo varios dueños.

En la actualidad, Casa Lito es propiedad de Óscar Julio Cuervo y María Teresa Suárez. El cocido de garbanzos y la merluza con patatas son dos de los platos que borda su cocina y que busca en él una clientela fiel.