PSOE y Somos, los dos grupos políticos con mayor representación en el tripartito, se oponen a pedir un informe externo que valore la actividad de La Auxiliar de Recaudación, la empresa que cobra los tributos en la ciudad y a la que el tripartito concedió una prórroga de un año en su contrato, que finalizaba a finales de diciembre. Ambos partidos creen que con un informe interno es suficiente, echando por tierra así la propuesta de IU, que ve "mejor" tener dos informes, uno interno y otro externo, para así poder comparar ambos y sobre los resultados decidir sobre el futuro de la recaudación en la ciudad. El alcalde, Wenceslao López, hizo constar en acta, no obstante, que aunque no es partidario de un segundo informe, no descarta la posibilidad.

El gobierno local mantiene la idea de crear una empresa municipal para recaudar impuestos, que empezaría a funcionar en el año 2017.