Los integrantes de las marchas de la dignidad que ocuparon el 22 de octubre el Ayuntamiento dieron ayer su versión de los hechos. Dijeron que la acción fue planificada antes de las elecciones de mayo, que no iba contra el tripartito, que eligieron el Ayuntamiento por ser "la casa de todos" y que durante la negociación con el Alcalde y varios concejales "hubo tensión". También rechazaron las "cinco denuncias" que recibieron los manifestantes que durmieron en la plaza. En la imagen, varios manifestantes, ayer, en la plaza del Ayuntamiento.