El Teléfono de la Esperanza de Asturias conmemora sus cuarenta años de actividad con una semana de talleres, conferencias, consultas e información a los ciudadanos englobados en las jornadas "Un mundo conectado". Ayer, en la inauguración de los actos en la plaza de Trascorrales, la consejera de Servicios Sociales, Pilar Varela, declaró que "una sociedad es más fuerte si es capaz de reconocer a los mejores ejemplos y el Teléfono de la Esperanza es el mejor ejemplo de solidaridad".

La concejala ovetense de Atención a las Personas, la socialista Marisa Ponga, destacó la labor de los voluntarios del Teléfono de la Esperanza, que ya superan el centenar y comentó que la colaboración con el Ayuntamiento de Oviedo se mantiene desde hace ya más de diez años. En la apertura institucional de las jornadas intervinieron también el director general de Salud Pública del Principado, Antonio Molejón, que reconoció como distintivos de la organización el "anonimato, la inmediatez y la escucha".

El presidente del Teléfono de la Esperanza en Asturias, Hilario Paz, dio algunos datos de la actividad de la asociación durante el último año. Habló de 7.200 llamadas recibidas, de 39 talleres y grupos de ayuda y de 229 personas atendidas por vía telefónica.

Rosa de Arquer, una de las colaboradoras de la organización explicó que a lo largo de los próximos días habrá talleres sobre autoconocimiento, meditación, control emocional, crecimiento interior y otros asuntos semejantes. Las inscripciones ya están prácticamente completadas, indicó, así que ya no hay plazas libres para asistir a la mayoría de ellos. Sin embargo, las conferencias de las siete y media de la tarde están abiertas a todos -la de hoy es la del psiquiatra José María Uncal-, así como las consultas personales y las demostraciones sobre cómo se responden las llamadas.