"El resultado nos da igual. Aquí lo importante es hacer amigos y pasarlo bien". Con estas palabras resume Jaume Sabater, estudiante de Ciencias Ambientales, el espíritu de las jornadas de convivencia entre colegios mayores que han organizado este fin de semana los ovetenses San Gregorio y América. Lo hace mientras el equipo femenino de fútbol sala de su colegio juega un partido. Para esta edición -la cuarta- se han desplazado hasta el Principado 20 integrantes del Colegio Mayor Oviedo, de Salamanca, y otros tantos del San Isidoro leonés. Todos ellos disfrutan desde el viernes de un fin de semana cargado de actividades deportivas y culturales.

"Nos están tratando de lujo. Nos han llevado a ver la ciudad, nos han invitado a una espicha...", explicó Sabater, todo un veterano en estas lides, que ha participado en todas las ediciones de estos encuentros universitarios en los que cada año rota la sede. "Está siendo una experiencia buenísima. Da gusto venir a esta ciudad y ser recibidos de esta forma. Estamos muy agradecidos a toda la organización", aseguró Amador Fernández, subdirector del colegio Oviedo, que participa por primera vez en estos encuentros universitarios.

En esta ocasión han sido San Gregorio y América los organizadores. "El primer día -viernes- organizamos una espicha de convivencia y hoy -por ayer- pasaremos la tarde disputando un torneo, masculino y femenino, de fútbol sala. Para mañana -por hoy- está previsto que se realice la entrega de trofeos y despidamos a nuestros huéspedes", relataron Raquel González y Carlos Fernández, ambos colegiales del San Gregorio. En la misma línea, Lucía Fernández, residente en el América, sostuvo que "gracias a la colaboración" de los participantes "la organización fue muy sencilla".

Tanto salmantinos como leoneses pernoctaron en la residencia de estudiantes de Mieres este fin de semana, ya que en los colegios mayores ovetenses no había plazas suficientes para alojar a los invitados, lo que no supuso ningún tipo de contratiempo. "No estamos teniendo mayor problema. Simplemente cuadramos los horarios con el autobús que tenemos contratado y ya está", resumió Fernández. En estas reuniones la organización se encarga de planificar el fin de semana y de dar cobijo a sus huéspedes, que tan solo tienen que hacerse cargo de los costes del viaje. "Es una forma ideal para hacer amigos y fomentar el espíritu de los colegios mayores", recalcó Sabater.