Miguel Ángel González (Madrid, 1975) dedica unos veinte minutos al día a hacer ejercicios de cálculo y lectura. También lo hacen sus compañeros de trabajo en la sede madrileña del método Kumon España. Se trata de un sistema japonés de aprendizaje que mejora las capacidades y habilidades de sus alumnos y que está causando furor en España, con 21.000 estudiantes en 240 centros. El método llegará a Asturias en septiembre con una academia en Oviedo, dos en Gijón y otra en Avilés lideradas por profesionales que, como Miguel Ángel, predican con el ejemplo y reservan un momento al día para el Kumon.

-¿En qué consiste este método japonés?

-Es un programa de aprendizaje que usa el cálculo y la lectura como herramientas para desarrollar las capacidades, habilidades y aptitudes de los alumnos. Lo fundó hace cincuenta años Toru Kumon, un profesor de matemáticas de Osaka que ha conseguido que este sistema pedagógico sea un número uno en Japón.

-Entonces, ¿los colegios españoles no enseñan correctamente las matemáticas?

-Nada de eso. El método Kumon no sustituye al colegio, sino que es una forma de aprovechar al máximo el potencial de un alumno y conseguir que aprenda a gestionar sus recursos y se haga autodidacta. Nuestros centros tienen un 15 por ciento de niños del ciclo de Infantil y un 45 o 50 por ciento de Primaria. Y el resto son de Secundaria y Bachiller. Allí los chavales trabajan el cálculo, que supone un 30 o un 35 por ciento del programa curricular de los colegios y las escuelas.

-¿Los centros Kumon son en realidad academias de apoyo para niños que suspenden?

-Ésa no es nuestra filosofía. Los centros Kumon funcionan como una red de enseñanza que prepara a sus alumnos para el futuro. Acuden niños que tienen alguna dificultad en clase, pero también otros cuyas familias desean que no los tengan en el futuro. Es importante que cada estudiante tenga un punto de partida sencillo y avance a su ritmo porque así su actitud siempre será positiva. De esa forma, es posible que un niño pase de odiar a amar las matemáticas, por ejemplo. O se aficione a la lectura.

-¿Cuál es su metodología?

-En cuanto llega un niño lo primero que hacemos es un test diagnóstico de matemáticas y lectura para detectar su nivel de conocimiento, qué capacidades tiene desarrolladas y cuál es su actitud ante el estudio. Una vez que lo sabemos, empezamos a trabajar con él. El programa de matemáticas tiene 21 niveles y cada uno de ellos se compone de una secuencia de 200 hojas de ejercicios agrupadas en cuadernillos de diez. El de lectura se compone de 18 niveles que van desde el inicio del aprendizaje lector a través de la decodificación de palabras, hasta el análisis crítico de textos.

-Usted hace deberes a diario, ¿forma parte del método?

-Sí. Pero son ejercicios. El alumno trabaja todos los días del año, asiste a clase dos veces por semana y el resto de días hace tareas en casa. La familia también debe participar.

-¿Los padres tiene que hacer los ejercicios?

-El papel de los padres dentro del método Kumon es clave y su colaboración repercute directamente en favor de su hijo porque el alumno trabaja más días en casa que en el centro. Básicamente, las familias les motivan.

-El método Kumon llegará a Asturias en septiembre. ¿Dónde va a estar en Oviedo?

-Aún no lo sabemos. Hemos iniciado el proceso de selección de las personas que están interesadas en abrir un centro Kumon en Asturias y para las que quieran formar parte del profesorado. Abriremos en septiembre un centro especializado en Oviedo, dos en Gijón y otro en Avilés, salvo que no encontremos el personal adecuado.

-¿Los profesores deben ser licenciados en Matemáticas?

-Deben ser licenciado universitarios, pero no necesariamente matemáticos. Lo que sí pedimos es que tengan una clara vocación pedagógica. Kumon Asturias se encargará después de formarles específicamente en sus centros de trabajo para que sepan manejar el material y entiendan la mecánica del sistema de aprendizaje. Al final, todos practicamos el método y es muy útil para la vida diaria. En cuanto a los responsables de los centros, también buscamos gente con vocación educativa, pero que sea capaz de gestionar un negocio de este tipo.