La Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) abrió un expediente sancionador al Ayuntamiento de Oviedo por un vertido de aguas residuales sin depurar que llega al cauce del río Nora. Los ecologistas, que denunciaron que las aguas proceden de un colector municipal del sistema general de saneamiento ubicado en el barrio de la Corredoria, exigieron al gobierno local (Somos, PSOE e IU) que adopte medidas para paliar los "daños ambientales graves" que está causando este vertido.
La organización conservacionista, cuya denuncia dio lugar a la incoación del expediente, subrayó ayer en un comunicado que estos vertidos representan una "contaminación continua por negligencia" de la administración y representan "un riesgo grave para el equilibrio de los sistemas naturales". "Estos hechos suponen un claro delito de acuerdo a la Ley Orgánica 10/1995", señalaron.
En la misma nota, los ecologistas recuerdan que la normativa europea obliga a la recogida y tratamiento de las aguas residuales urbanas y que, pese a ello, muchos núcleos urbanos asturianos "siguen vertiendo las aguas sin depurar a los ríos con el correspondiente impacto".
"A pesar de los millones de euros de fondos europeos gastados en obras de colectores, depuradoras y obras hidráulicas, todavía hay miles de asturianos que vierten sus aguas sin depurar por la negligencia de los ayuntamientos y del Principado, que lo permite", advirtieron los ecologistas, que añadieron: "Esperemos que, además de sancionar a los responsables, se tomen las medidas adecuadas para paliar estos vertidos".
