José Antonio Gómez Fraguela es profesor del departamento de Psicología Clínica y Psicobiología de la Universidad de Santiago de Compostela desde el que se ha desarrollado el programa "EmPeCemos", que entrena a los padres para desarrollar las actitudes sociales de sus hijos y evitar comportamientos problemáticos, con las drogas por ejemplo. Asistió en Oviedo a las jornadas Municipio y Drogodependencias, organizadas por el Ayuntamiento de Oviedo y clausuradas ayer.
-¿La mejor prevención es actuar cuanto antes?
-Cuanto antes se limite el desarrollo del problema mejor. Existen recursos que pueden servir para la identificación temprana: servicios sociales, centros de menores... Eso requiere recursos. La política de macrocentros con muchos chavales y poco personal no permite muchas intervenciones, el problema se cronifica y entonces es más caro atenderlo.
-¿Los niños están cada vez más desprotegidos?
-Están entre los principales perjudicados de la crisis.
-¿Y el sistema de valores y las redes familiares y sociales?
-Se han perdido valores de sociedades anteriores. En España se ha pasado de una sociedad colectivista, donde el control social ejercía valores muy positivos, a una individualista, donde lo importante es el logro personal.
-¿Toda la sociedad debe responsabilizarse del cuidado de los menores, no solo los padres?
-Es responsabilidad de la sociedad en conjunto. Incluso en las familias que se esfuerzan en que sus hijos sean felices puede haber problemas, porque los niños tienen que aprender a enfrentarse a la frustración y al fracaso.
-¿Hay que educar primero a los adultos?
-A la sociedad. Hay que procurar no dar mensajes hipócritas a los menores, para que puedan interiorizarlos.
-¿La actitud general hacia el alcohol repercute en el consumo de otras drogas?
-Sí, muchos chavales dicen: yo consumo esto pero no alcohol, esto es algo que tiene que ver con mi cultura juvenil... Y realmente es lo mismo. Los jóvenes con las drogas son una réplica de los adultos con el alcohol.
-Se percibe el acercamiento a las drogas como parte de la transición hacia la edad adulta.
-Pues no es así. Hay que cambiar la mentalidad social para influir en el menor y tener claro que no es normal que un chico de quince años se emborrache o consuma. Y el problema es también quien le facilita el alcohol. En España está prohibida la venta de alcohol hasta los dieciocho años. Hay que hacer cumplir la ley.
-¿Es buena tal y como está?
-Sí, pero si se cumple.