La Policía Nacional investiga varios robos en domicilios del centro de Oviedo ocurridos en las últimas semanas, los más recientes en las calles Matemático Pedrayes e Independencia donde los ladrones se llevaron joyas, dinero y cajas fuertes. Según ha podido averiguar este periódico, el modus operandi de los cacos consiste básicamente en forzar las cerraduras y entrar en viviendas previamente seleccionadas por la tarde y cuando no hay nadie.

Los agentes tratan de determinar si los ladrones acceden a los domicilios por el método del "resbalón, que consiste en mover el pestillo introduciendo una radiografía o una tarjeta de crédito y sólo funciona cuando la puerta está cerrada sin haber echado la llave. O bien si logran entrar por medio del llamado método "bumping", basado en insertar una llave en la cerradura y golpearla con un objeto hasta conseguir que las piezas o pistones se separen liberando así el giro de la llave.

Todo apunta a que se trata de especialistas porque actúan en el momento preciso en que las viviendas están vacías, y normalmente lo hacen alrededor de las seis o las siete de la tarde. Además, en algunos casos los ladrones habrían ido previamente a los edificios elegidos haciéndose pasar por trabajadores de compañías eléctricas o de seguros para llamar en cada puerta con el objetivo de saber cuáles están vacíos e incluso estudiar los horarios de sus moradores.

Oviedo sufrió una oleada de robos por "bumping" en verano. Una banda experta entró en una treintena de domicilios sin dejar huellas y se llevó oro, joyas, dinero o dispositivos digitales, pero rara vez objetos de grandes dimensiones o electrodomésticos. Los barrios más afectados fueron Ciudad Naranco, Pumarín, Vallobín y La Corredoria.

Desde finales del pasado mes de julio se sucedieron denuncias de ovetenses que al regresar a casa de sus vacaciones se encontraron con sus hogares desvalijados. Las últimas denuncias formalizadas correspondieron a la calle Rodríguez Cabezas, en la zona de Pumarín, y a la calle Menéndez Pelayo, en Ciudad Naranco, después de que el hijo de un ovetense de vacaciones revisase la vivienda comprobando que, tal y como temía su padre, también les hubieran robado.

La Policía Nacional llegó a realizar un llamamiento a la colaboración ciudadana y finalmente detuvo a varios implicados en "bumping".