"Son unas cajas de cartón en la que metemos material escolar para los niños saharauis", explica Pelayo García, alumno de 3º de Primaria del colegio Santo Domingo, mientras ultima la decoración de su paquete. "Libretas, bolis, estuches, ropa deportiva...", detalla su compañero Nacho Rivas, que a su lado, recita los artículos que han preparado. El centro entregará hoy un total de 800 cajas a los miembros Asociación Asturiana Amigos del Pueblo Saharaui, que les visitaron durante el curso para explicarles, cuenta Sara Bárcena, coordinadora de Pastoral y profesora de lengua y literatura, "la realidad de los campos saharauis". Para tratar de mejorar su situación han organizado una donación con la que "los niños se lo pasan bien y, además, hacen algo por los demás".
El proyecto, con el que se ha dado visibilidad a las celebraciones de la semana de los Derechos Humanos, tiene su precedente en un mercadillo de productos elaborados con material reciclado fabricados por los propios alumnos con el que se recaudaron 800 euros para la misma causa. Una cifra que es una coincidencias, pues este año la orden de los dominicos cumple ocho siglos y porque "tenemos precisamente 800 alumnos". De ahí también, la cantidad de cajas que los niños han decorado con mensajes, dibujos y pegatinas, que serán enviadas. La responsable de Pastoral, explica, no obstante, que "podrían ser incluso más". Padres y profesores han echado también el resto e igualado la implicación de los alumnos y la solidaridad dominica podría rebasar las expectativas.
Algunos niños se han animado a incluir una carta en su paquete, como Alexander García, de 9 años, que además de material escolar envió un mensaje al saharaui que recibirá el paquete: "Espero que te guste el regalo y que lo disfrutes. Me ha gustado hacerte la caja y poder escribirte".
