"Ninguna de las doce canteras y diez areneros que existen en funcionamiento en el municipio, ocupando más de 2,5 millones de metros cuadrados de extensión, cumplen las exigencias urbanísticas municipales, según explicó a este periódico la vicealcaldesa, Consuelo Marcos Vallaure. Además, las 61 explotaciones de este tipo que fueron cerradas en los últimos años no restauraron el suelo al cesar los trabajos, unos 300.000 metros cuadrados, como es preceptivo".