Gobierno y oposición volvieron ayer a sacar filo y rédito, en distinto sentido, a la propuesta del ministerio de Defensa para sentarse a hablar sobre el futuro de la parcela de la fábrica de armas de la Vega. La reunión, que tendrá el próximo 13 de junio entre el alcalde de Oviedo, Wenceslao López, y la titular de la cartera de Defensa, María Dolores de Cospedal, es para los populares un ejemplo del "sentido común" del Gobierno central y de cómo atiende a las demandas de los ovetenses, en oposición a las posiciones del tripartito. Izquierda Unida, por su parte, ve la cita como una posibilidad de hacer ver a Defensa "el absurdo" del abandono de esos terrenos.

El concejal del PP Gerardo Antuña declaró que el anuncio realizado por la ministra "es un claro ejemplo de que cuando las cosas se hacen bien, los resultados llegan". Según Antuña, "en cuanto el Ayuntamiento solicitó ser escuchado, el Gobierno de Mariano Rajoy atendió". "Es una práctica habitual en la relación entre Administraciones", siguió el edil popular, "rota por el propio tripartito en los últimos dos años. Un gobierno compuesto por tres partidos que ni escuchan, ni hablan entre ellos, ni, mucho menos, inician conversaciones para lograr beneficios para la ciudad".

Antuña no dudó en afear que mientras el Alcalde anunciaba ayer la reunión con Madrid sus socios de Somos criticaran la falta de respuesta del Gobierno central, ignorantes de que la cita ya se había fijado. "El espectáculo, con unos socios diciendo una cosa a través de los medios, y otros diciendo lo contrario, sólo aporta poca credibilidad y desconfianza, y refleja el descontrol, la descoordinación y la incapacidad o la falta interés del tripartito defender los intereses de los ovetenses".

Justo lo contrario, para el PP, de lo que hace el Gobierno de España que, insistió, "cumple con Oviedo y con los ovetenses. El Alcalde va a ser recibido para escuchar las necesidades y reivindicaciones de los ovetenses. Y lo han hecho con la mayor brevedad; sólo había que pedirlo".

Gerardo Antuña acusó al tripartito de haberse negado al diálogo con Madrid, "dedicándose a culpar al PP de boicotear a la ciudad de Oviedo porque lo veían más rentable que anunciar una entrevista como la que ahora anuncian". "Las cosas son mucho más sencillas de lo que algunos pretenden que se vean", concluyó el concejal del PP, "y una vez más, frente a un modelo de gobierno que solo patalea y busca culpables, se ha impuesto la razón y la coherencia del gobierno del PP, un gobierno que escucha, que dialoga y que muestra disposición para atender las demandas de los ovetenses".

Desde Izquierda Unida, su portavoz, Cristina Pontón, también habló de "sentido común" pero para desear que sea lo que "impere" en la reunión en Madrid. Pontón se mostró aliviada con la "oportunidad" que se le da al gobierno municipal de explicar "de primera mano" los problemas de la parcela y confió en que se podrá "hacer ver a Madrid la situación absurda de esa zona de Oviedo". Este absurdo se resume, según la portavoz de Izquierda Unida, en que "no puede haber unos terrenos en decadencia por la inoperancia del Gobierno central. Menos cuando es una parcela crucial para Oviedo y se debería recuperar para la ciudad".