El traje de bronce que lucirá Tino Casal en la céntrica calle Palacio Valdés, donde está previsto que se instale una escultura de un metro y ochenta centímetros de alto que refleje su figura, ya está en proceso de confección. Los hermanos Anselmo y Alfredo Iglesias trabajan en su taller del polígono industrial de Granda, en Bobes, para dar forma a un homenaje que puso en marcha la Asociación Cultural Carlos Llano. Lo hizo a través de una plataforma a la que se han adherido profesionales de todo tipo, fundamentalmente músicos, y que aún tiene que recaudar 16.000 euros para cubrir el coste de 20.000 que tiene la pieza. Y mientras la colecta sube, Anselmo Iglesias disfruta llevando al cantante al bronce: "La estoy gozando".
El escultor, que se encarga de la parte artística, mientras su hermano Alfredo dirige todo el proceso de fundición, se ha preparado a conciencia para el trabajo. "He visto unos cinco mil vídeos", dice Anselmo Iglesias entre risas, al tiempo que añade que para documentarse ha utilizado aún más fotografías. Puede recurrir, además, a sus propios recuerdos ya que en su juventud escuchó mucho a Tino Casal; y su mujer, "aún más". En estos momentos, trabaja sobre el modelo a escala que sirvió también para elaborar los premios entregados en la gala Tino Casal, que se celebró por primera vez en marzo en Madrid y en la que actuaron Nando Agüeros, "Los Linces", y Héctor Tuya entre otros músicos.
Anselmo Iglesias trabaja en estos momentos en la estructura de la escultura que se colocará en Palacio Valdés, aunque aún tiene que darle forma con cerámica. Su hermano Adolfo explica que creará después unos moldes de cera que servirán para realizar una fundición en bronce que, como último paso, será retocado y pulido. Una de las principales complicaciones en replicar con fidelidad a una de las figuras de la movida madrileña. Y representar "su aire". De ahí la postura elegida por el escultor, que le representará de pie, con una mano sobre la cintura y la otra frente a la cara. Una pose que el cantante repetía durante sus conciertos y que reconocen de inmediato sus fans.
"La cara es una de las partes que más tiempo lleva", dice Anselmo Iglesias, que calcula que en un mes puede tener preparada la pieza que servirá de molde y que la fundición podría estar terminada en septiembre. Para poder cumplir los plazos, la plataforma promotora de la estatua, que realiza reuniones periódicas en el teatro Campoamor, quiere dar un nuevo impulso a la colecta popular. Un acelerón en la financiación necesario para reunir los 16.000 euros que faltan para que Tino Casal pueda lucir su traje de bronce en el centro de Oviedo.
