Ni el concejal de Festejos, Roberto Sánchez Ramos, ni el Alcalde de la ciudad, Wenceslao López, avanzaron grandes novedades para las fiestas del año próximo. El edil de Izquierda Unida ofreció, sin embargo, dos claves. La primera llega después de la polémica surgida en el Campo de San Francisco por la presencia de camiones que trataron de acceder al recinto ocasionando problemas de tráfico. Sánchez Ramos confirmó que el año que viene no habrá camiones-escenario en el Bombé. A las orquestas se les pondrá un escenario permanente en el Bombé que, según avanzó el concejal, servirá también para reforzar la programación en esta zona del parque dedicada a otros públicos, como los conciertos infantiles.

La otra novedad es la posibilidad de habilitar las pistas de San Lázaro para grandes conciertos. Esta posibilidad está condicionada a una reforma de las instalaciones que introduzca una salida de emergencia. En todo caso, el concejal insistió en que la plaza de la Catedral seguirá sirviendo de escenario, "como en Santiago de Compostela" y siendo, añadió, "respetuosos con el patrimonio".