"Desconocemos absolutamente la denuncia y por lo tanto la investigación". Así se refirió ayer el concejal de Cultura y presidente de la Sociedad Ovetense de Festejos (SOF), Roberto Sánchez Ramos (IU), a la información publicada ayer por este periódico en la que desvelaba que la Fiscalía Superior de Justicia del Principado investiga si el tripartito prevaricó al encargar a la SOF organizar las pasadas fiestas de San Mateo.

La denuncia del PP que motivó las diligencias, recalca que la Junta de Gobierno actuó "desbordando la legalidad de modo evidente, flagrante y clamoroso", en alusión al alcalde Oviedo, Wenceslao López, que actuó contra las advertencias del Secretario Municipal respecto al imposible encaje legal de una sociedad privada organizando actividad municipal y gestionando suelo público.

"La SOF se rige por leyes que sacó el PP de Oviedo desde el año 2011, y por lo tanto desde ese año el PP conoce a la perfección la situación de la sociedad, y nos han dejado a este Gobierno esa bomba de relojería que nosotros estamos gestionando dignamente. Queremos que las fiestas, que son de interés general sigan", precisó Sánchez Ramos.

A renglón seguido advirtió que cree que, "la demanda lo que opera es una cuestión de ensañamiento contra un gobierno que ha tratado y ha hecho unas fiestas dignas con un gran consenso social".

Sánchez Ramos calificó de "muy ruin" la demanda presentada por el PP. "Ellos tenían la bomba de relojería en sus manos y ahora pusieron el reloj para que estalle todo. Creo que es una afrenta a su pueblo, no al Gobierno de Oviedo, que lo que ha hecho es tomar decisiones sobre la SOF y hacer las mejores fiestas". A renglón seguido el presidente de la SOF aseguró que no esperaba esta denuncia y recordó que "todos éramos conocedores de la situación de la SOF", en alusión a los partidos políticos que estaban antes en la oposición. "Y sin embargo no hemos ido a la justicia para reventar las fiestas de Oviedo, que es en definitiva lo que trata de hacer el PP".