Las asociaciones feministas emplazan al Ayuntamiento de Oviedo a poner en marcha un servicio nocturno de autobús urbano que permita a las mujeres, por seguridad ante posibles agresiones machistas, solicitar que el vehículo se detenga fuera de las paradas establecidas y justo al lado del sitio al que vayan. Se trata de una iniciativa que ya funciona en otras ciudades españolas como Vigo, pero que no se encuentra entre las previsiones a corto plazo del tripartito para el transporte público ovetense. Así lo pusieron ayer de manifiesto fuentes municipales.
Gloria García Nieto, de la Asociación Feminista de Asturias, parte de la base de que lo que necesitan las mujeres es "dejar de ser víctimas" y que "no haya violadores por las calles", para apoyar la implantación de este servicio de autobús en Oviedo y en el resto de ciudades asturianas. "Resulta evidente que, en las circunstancias actuales, seguimos necesitando protección", afirma.
También defiende que los autobuses urbanos nocturnos paren donde lo necesiten las mujeres Eva Irazu, presidenta de la Plataforma Feminista de Asturias. "Los servicios públicos deben estar al servicio de los ciudadanos y con ese tipo de servicios se logra tal objetivo", sostiene Irazu, que también destaca el hecho de que se puede implantar a "coste cero" y sin ocasionar trastornos al resto de usuarios del transporte público. "Los recorridos no se cambian; los autobuses paran fuera de las paradas, pero sin salirse de las líneas establecidas", afirma esta militante feminista.
Un total de seis mujeres recurrieron a las paradas de autobús a demanda durante las dos primeras noches de funcionamiento del servicio recién estrenado en Vigo. Eran usuarias que viajaban solas y pidieron bajarse para quedarse más cerca de su destino y reducir la distancia a recorrer a pie.
