El listado de los comercios que abren sus puertas en los barrios de Pumarín, Teatinos, La Monxina, Guillén-La Fuerza y La Corredoria, por el que el tripartito pagó casi 15.000 euros, fue encargado por el gobierno local a una empresa externa atendiendo una petición expresa de la Asociación de Autónomos y Comerciantes de Oviedo (Adaco). Su gerente, Juan Carlos Canteli, confirmó ayer que fue este colectivo empresarial de la ciudad quien se dirigió al concejal de Economía, Rubén Rosón (Somos), para pedirle que el Ayuntamiento sufragara la realización de un censo "necesario", a su juicio, para conocer la realidad del comercio en esos barrios y para "saber qué se puede hacer con el mercado de abastos de La Corredoria".
Ciudadanos ha llevado este contrato a la fiscalía, que ya ha abierto diligencias, al entender que casi 15.000 euros es una cantidad demasiado elevada para pagar un estudio de 45 folios con los nombres, direcciones y responsables de los comercios de cinco barrios de la ciudad, así como por el hecho de que, según sostiene la formación "naranja", la factura se abonó antes de que se entregara el trabajo. Sin embargo, Juan Carlos Canteli defiende que el censo de negocios, encargado el pasado mes de diciembre, ya estaba en su poder en enero de este año, y que, además, se trata de una "herramienta muy útil" para su asociación. Sobre esta base, el gerente de Adaco asegura que no entiende la denuncia planteada por Ciudadanos, a la que considera "demoledora" para el colectivo de comerciantes.
"Campaña de acoso"
Por su lad o, Rubén Rosón achaca la denuncia a una "campaña de acoso del PP y de su marca blanca", en referencia a Ciudadanos, formaciones que, a su entender, "quieren paralizar el buen trabajo que estamos realizando, pero no lo van a conseguir". El edil de Economía defendió la limpieza del proceso y confirmó que el trabajo se llevó a cabo "a petición" de Adaco.
"Pedimos a la marca blanca del PP que no ataque a la asociación de comercio decana de la ciudad, dudando se su trabajo y profesionalidad", añadió Rosón, quien también emplazó a Ciudadanos a "abandonar el populismo" en sus intervenciones públicas. "Detrás del estudio de la situación del comercio hay muchas horas de labor y personal contratado para conseguir unos datos y una información imprescindibles, según nos trasladó Adaco en su día, para la promoción de nuestro pequeño comercio, uno de los objetivos del gobierno", subrayó el concejal.
El informe inicial para el estudio, de noviembre de 2017, justificaba la necesidad de disponer de un nuevo censo del Distrito 3 por lo obsoleto del último listado y por las nuevas ayudas europeas a la zona este de la ciudad. Por todo ello, se pedía un análisis de los negocios de esos barrios, con detalle sobre cambios en la titularidad o actividad, reformas, modernización, cursos de formación, asociacionismo o implantación de las nuevas tecnologías. Se presentaron tres presupuestos y se eligió al más barato. El trabajo se adjudicó en diciembre de 2017 por un total de 14.749,90 euros, con un plazo de ejecución de un mes. En el presupuesto (sin fecha de entrada), la partida más cara era la realización de un cuestionario a pie de calle (6.360 euros) y la grabación de los datos (3.180 euros). Los importes llamaron la atención de los responsables de Ciudadanos, que preguntaron por este asunto en marzo, cuando ya habían pasado dos meses del plazo. Entonces descubrieron que no había rastro del trabajo en el Ayuntamiento pero sí una orden de pago, lo que motivó la denuncia. La semana pasada, sostiene Ciudadanos, apareció el trabajo, de 45 páginas y con una simple relación de comercios.
