«Las fábricas de armas de Oviedo y Trubia fueron claves en el desarrollo industrial de Asturias». Lo dijo ayer, en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA, Roberto Suárez, autor del libro «Las reales fábricas de municiones gruesas de Trubia y de fusiles de Oviedo. De la utopía a la razón 1792-1859)», que recorre de forma exhaustiva la historia de ambas factorías. Roberto Suárez estuvo acompañado por el doctor en Historia José Balboa de Paz y el filósofo ovetense José Luis Esteban Magro, autores del prólogo y el epílogo del libro, respectivamente.

Ambas factorías se crearon con una idea preconcebida y eso hizo que no salieran del todo bien, tal como explicó el autor. «Los armeros se rebelaron porque no querían pasar al sistema de fábrica, con horarios establecidos», preferían continuar con el sistema gremial tradicional», indicó Roberto Suárez.

Trubia acogerá el próximo 30 de julio una recreación histórica de la primera colada del horno alto. Será una jornada lúdica en la que actuarán la banda de gaitas Camín de Fierro y el grupo de baile de San Claudio. También habrá jornadas gastronómicas en Trubia, Grado y Proaza, con productos consumidos en la época, como aves de corral. Por la tarde se recreará la colada, con trajes militares de época y carros de bueyes. No faltarán personajes como el obispo, el director de la fábrica y hasta Jovellanos. Covadonga de la Rúa ha creado para la ocasión un himno dedicado a Trubia.

«Antes de leer un libro de historia es importante saber quién es el que lo escribe, yo he hecho esto con Roberto Suárez y enseguida me di cuenta de que era una persona con una buena formación histórica», señaló José Balboa de Paz, doctor en Historia y autor del prólogo. Balboa de Paz explicó que la seguridad que ofrecían tanto Trubia como Oviedo, lejos de la frontera con Francia, fue una gran baza en la realización del proyecto. «En el libro aparece muy bien contextualizado el tipo de armas que se hacían y eso permite entender mejor la historia de las fábricas», añadió el prologuista, que destacó la gran tradición siderúrgica del noroeste de la Península.

La puesta en marcha de la Real Fábrica de Municiones Gruesas de Hierro Colado de Trubia se vinculó al dictamen que el Ingeniero militar naval Fernando Casado emitió el 5 de septiembre de 1792, aconsejando el punto de unión de los ríos Trubia y Nalón. En 1794 se iniciaron las obras de talleres, almacenes, viviendas y equipamientos sociales. Entre los años 1795 y 1796 se construyeron los hornos de fundición, “Volcán” e “Incendio”, de los que se cumplen 225 años y que aparecen de forma profusa en el libro.

En Oviedo, en 1856 el Estado expulsó a la orden religiosa de Santa María de La Vega alegando la construcción de un hospital aunque desde el primer momento se pensó en hacer una fábrica de armas para trasladar actividades desde Trubia, dirigida por Elorza, tal como explicó José Luis Esteban Magro.

La vida del rey Ramiro de León, a cargo de José Manuel García-Osuna, hoy


Esta tarde a las 18.30 horas el médico y escritor José Manuel García-Osuna hablará de su obra acerca de la vida del rey Ramiro II de León. Estará presentado por Manuel Ruiz de Bucesta, presidente del Instituto de Estudios Históricos Bances y Valdés. A continuación, a las 19.30 horas, el economista Diego Barceló, a quien presentará Javier Jove, analizará la situación del mercado laboral en Asturias.