Gijón, Selene ALONSO

La Orquesta Sinfónica y el Coro de Gijón traen a la ciudad algunas de las operetas alemanas más conocidas. El teatro Jovellanos acogerá mañana, miércoles, a las 20.30 horas, una actuación llamada «Una noche en la opereta». El concierto está dividido en dos partes, la primera durará unos tres cuartos de hora y la segunda rondará los cincuenta minutos de duración. En total se representarán cuatro operetas, dos de Johann Strauss II, «El barón gitano» y «El murciélago». Y dos de Franz Joseph Lehar, «La viuda alegre» y «Giuditta». Los encargados de dar vida a los personajes de estos cuatro títulos son: Saioa Hernández, soprano; Lorena Valero, mezzosoprano; Andeka Gorrotxategi, tenor; Javier Agulló, tenor, y Javier Fernández Mejuto, bajo. Aunque en este tipo de obras no sólo se les escucha cantar, sino que hay una combinación de diálogos y música, muy similar a la zarzuela, un género mucho más conocido y representado en España.

Algunos de los títulos que se representarán son de los más conocidos y ya se han puesto en escena varias veces en nuestro país, pero siempre queda el problema del idioma, tal como comenta uno de los solistas, Javier Agulló, «para nosotros será difícil interpretar en alemán, pero es una ventaja para el público, ya que puede ver la obra en su versión original, tal como se escribió, y eso es importante». Pero Óliver Díaz, director del coro y de la orquesta, ha pensado en esto y se ha dado cuenta de que el público puede que tenga dificultades con esta lengua, por lo que ha decidido incluir algunas ayudas. «A lo largo de la representación se proyectarán distintas películas y vídeos, de los años veinte, treinta y cuarenta, que van ilustrando la historia, y así los asistentes podrán seguir el hilo de la historia sin ningún problema».

Una cosa en la que todos los solistas participantes en esta «Noche en la opereta» coinciden es que es un gran honor poder representar estos títulos, «sobre todo porque es en casa», añadía Javier Fernández Mejuto. Pero no es lo único en lo que están de acuerdo; también hay consenso a la hora de valorar cómo se lo pasará el público: «La opereta siempre tiene algo humorístico, será algo muy divertido y la gente se reirá mucho», explica Óliver Díaz. Aunque Andeka Gorrotxategi cree que el público no será el único que se lo pase bien, «será algo entretenido para todo el mundo, para los que vengan a vernos y para los que estemos encima del escenario». Por ello todos recomiendan encarecidamente ir al teatro Jovellanos mañana, miércoles. A lo que María Teresa Sánchez, gerente del teatro gijonés, añade: «Las entradas son muy baratas para lo que es el espectáculo, 20 euros general, 35 en el entresuelo y 40 en el patio de butacas». Por si faltaba algún argumento.