La Policía Nacional se está encontrando con "dificultades importantes" para aclarar los hechos que rodean la muerte violenta de Alfredo Suárez, el ebanista de 64 años que hace tres meses fue hallado muerto con un fuerte golpe en la cabeza en el almacén de muebles de cocina de Oviedo en el que trabajaba.

Ante esa situación, una unidad policial especializada en crímenes violentos revisará toda las pruebas y actuaciones llevadas a cabo por la policía desde la fecha del crimen, cometido el 10 de noviembre del pasado año, ha informado hoy el delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín.

En rueda de prensa ha precisado que aún no disponen de los resultados de todas las pruebas que se han mandado a analizar por la policía científica, pero que las dificultades que están encontrando para esclarecer los hechos les ha llevado a solicitar la intervención de una unidad especializada.

En principio, ha señalado que todo el trabajo desarrollado hasta el momento en torno a este suceso está ya recopilado y dispuesto para que lo utilicen los agentes en el momento que lo soliciten.

El cuerpo sin vida de Alfredo Suárez fue hallado por una compañera de trabajo el 10 de noviembre en el interior de la tienda Brico Cook de Oviedo, situada en la calle Coronel Bobes de Ciudad Naranco.

La mujer encontró a la víctima tendida en el suelo cuando volvió de comer, por lo que el crimen pudo haber tenido lugar entre las 13:00 y las 15:00 horas.

El fallecido, vecino de Gijón, solía quedarse a comer solo en el interior del almacén en el que los investigadores barajan que pudo haber sido víctima de un intento de robo.